El vicepresidente senior de relaciones con inversionistas de Itaú, Alfredo Egydio Setúbal, dijo que los esfuerzos para reducir las tasas de interés locales son beneficiosos para el país sudamericano, pero que el problema reside en la forma del debate y el momento escogido.
Un ejecutivo de alto rango del mayor banco del sector privado de Brasil, Itaú, dijo que la presión del gobierno para que el sector baje los costos de endeudamiento puede ser inoportuna, porque un alza de la morosidad y la desaceleración del crecimiento económico podrían deteriorar la calidad de las carteras de créditos, según reportó este viernes un diario local.
O Estado de S. Paulo reportó que el vicepresidente senior de relaciones con inversionistas de Itaú Unibanco Holding, Alfredo Egydio Setúbal, dijo en un evento que los esfuerzos para reducir las tasas de interés locales son beneficiosos para Brasil, pero que el problema reside en la forma del debate y el momento escogido.
"Nadie duda que el gobierno está en lo correcto al fomentar este debate", dijo Setúbal, según fue citado por Estado.
El ejecutivo es miembro de una de las familias que controla a Itaú Unibanco.
Desde abril, la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, le ha exigido a los bancos del sector privado que aumenten los créditos y que reduzcan las tasas para ayudar a impulsar a la mayor economía de América Latina.
El gobierno de Rouseff está usando a los bancos estatales para provocar una baja de las tasas y para generar competencia en un sector que tradicionalmente ha sido el más rentable de Brasil.
Rouseff quiere que una parte de las ganancias de los bancos se redistribuyan en forma de más acceso a financiamiento de largo plazo y en tasas de crédito más bajas.
Según analistas, el riesgo de la estrategia, es que los bancos privados podrían verse obligados a asumir una postura menos prudente sobre el crédito para proteger su participación de mercado, justo cuando la morosidad aumenta y mientras la economía del país intentar recuperar impulso.
Setúbal agregó que las discusiones recientes entre el gobierno y los bancos sobre el asunto fueron "menos tensas", reportó el diario.
Setúbal criticó también la forma en la que el banco central calcula el diferencial -lo que los bancos cobran a los deudores por sobre lo que le pagan a los depositantes- que también es el componente principal de sus ganancias, reportó el diario, pero sin dar más detalles.