Con más de 60 años de funcionamiento, la terminal se convertirá en un moderno y gran parque y alejará, de paso, el ruido de los aviones al sector de Tababela, a unos 18 kilómetros de Quito, donde se levanta el nuevo aeropuerto.
El aeropuerto "Mariscal Sucre" de Quito, enclavado en plena capital ecuatoriana, cerrará definitivamente sus operaciones este martes y se mudará a una nueva terminal construida en una meseta situada en uno de los valles aledaños a la ciudad.
Con más de 60 años de funcionamiento, la terminal se convertirá en un moderno y gran parque y alejará, de paso, el ruido de los aviones al sector de Tababela, a unos 18 kilómetros de Quito, donde se levanta el nuevo aeropuerto.
El moderno complejo, que mantendrá el nombre de "Mariscal Sucre", entrará en funcionamiento el miércoles con 129 operaciones, según informó Quiport, corporación encargada de la administración del proyecto.
Un vuelo doméstico a Guayaquil de la línea aérea nacional Tame, previsto para las 18.55 hora local de este martes (23.55 GMT), pondrá fin a las operaciones en el antiguo aeropuerto de Quito
Otro vuelo de Tame, con origen en Guayaquil, aterrizará en la nueva pista de Tababela a las 09.00 hora local del miércoles (14.00 GMT), con lo que se dará inicio oficial a sus operaciones.
La salida del antiguo aeropuerto de Quito era esperada por los capitalinos, sobre todo los vecinos de la zona norte de la ciudad, afectados por el ruido de los aviones y por los accidentes que han sucedido a lo largo de su historia.
La nueva terminal, cuyo proyecto empezó a ejecutarse en 2003, fue entregada en octubre pasado, pero no pudo inaugurarse debido a que varias obras de acceso y logística no se habían completado.
El alcalde de Quito, Augusto Barrera, accedió entonces al pedido de empresarios y exportadores para que se difiera la inauguración y puso como tope este 20 de febrero.
Por eso, mañana, con la presencia del presidente de la República, Rafael Correa, se inaugurará de forma oficial la nueva terminal, considerada como una de las más modernas de la región.
"Quito inaugura el más moderno aeropuerto internacional de América Latina", señala Quiport en su invitación para la puesta en marcha de la terminal de Tababela.
"El nuevo aeropuerto es de categoría mundial, seguro, más eficiente que el actual y cumple con los estándares internacionales más exigentes", añadió la corporación.
La nueva pista, la terminal y las infraestructuras logísticas del aeropuerto en Tababela abarcan una superficie de 1.500 hectáreas, lo que supone diez veces más que el antiguo aeródromo capitalino.
La pista de aterrizaje del nuevo aeropuerto tiene 4.100 metros de largo, la terminal de pasajeros abarca 38.000 metros cuadrados y el espacio para el servicio de carga es de 42.000 metros cuadrados.
Su torre de control es la más alta del país con 41 metros de altura y estará equipada con tecnología de última generación para el control de tráfico aéreo, informó Quiport.
En esa corporación concurren prestigiosas compañías del ramo, como las canadienses Aecon y Airport Development Corporation (ADC), la estadounidense Houston Airport Systems-Development Corporation y las brasileñas Andrade Gutierrez y Companhia de Concessoes Rodoviárias.
Además, la Canadian Commercial Corporation (CCC), entidad gubernamental de Canadá y garante del proyecto, que empujó la planificación, desarrollo y negociación financiera del nuevo aeropuerto de Quito.
Overseas Private Investment Corporation (OPIC) y Export Import Bank (Eximbank), de Estados Unidos, la canadiense Export Development y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) también han financiado la obra.
