Las empresas ya han invertido en el país sudamericano un total de US$ 1.165,8 millones, distribuidos en exploración, construcción y ampliación y sostenimiento.
La industria minera lleva anunciado desde comienzos de 2020 inversiones por al menos US$ 8.757 millones en Argentina, en proyectos que se encuentran en distintas etapas de ejecución, ya sea en obras de exploración, construcción o ampliación y sostenimiento de operaciones en yacimientos metalíferos y de litio.
Así se desprende de los anuncios realizados por las compañías del sector minero desde febrero de 2020 hasta la fecha, un período que comprende casi desde el inicio de la actual gestión de gobierno y pocas semanas antes de la declaración de la pandemia de coronavirus.
De acuerdo al relevamiento publicado por @MineriaNumeros, una cuenta de la red social Twitter promovida por la Secretaría de Minería de la Nación Argentina, el total de inversiones asciende a US$ 8.757,9 millones, de los cuales el proyecto Josemaría, en la provincia de San Juan, concentra casi la mitad de los anuncios con compromisos por US$ 4.200 millones.
Ese proyecto propiedad de la minera canadiense Lundin es considerado como el posible punto de partida de la nueva era del cobre en la Argentina, como parte de un portfolio de al menos cinco megaproyectos que podrán dar respuesta al incremento mundial de la demanda de ese mineral.
Fuentes privadas del sector explicaron que la decisión de promover las inversiones, formalizada a través de la sanción del decreto 234/2021, permitió acelerar una de las situaciones que preocupaban para la toma de decisiones de inversión, especialmente en el manejo de divisas.
Pero más allá del marco normativo, se destaca el contexto el incremento de los precios internacionales y de la demanda creciente de una canasta de minerales vinculados al desarrollo que se proyecta durante los próximos años vinculados a las energías renovables y la electromovilidad.
Además, para mantener la dinámica de las inversiones el Gobierno argentino está trabajando en medidas que permitan asegurar la estabilidad fiscal a largo plazo, acelerar plazos de devolución del IVA de exploración y del IVA de construcción e introducir el principio de la progresividad en el régimen impositivo en algunos impuestos que pueden restar competitividad a la minería.
Se trata de un conjunto de definiciones que desde la Secretaría de Minería y el Ministerio de Desarrollo Productivo esperan que se pueda avanzar a la par del lanzamiento del Plan Estratégico para el Desarrollo Minero de próxima presentación.
Pero el proyecto de cobre Josemaría, el primer con que cuenta la Argentina desde el cierre de la mina Alumbrera, es uno de la cartera de seis mega pórfidos de cobre que están en etapa avanzada de factibilidad y que junto a los de litio concentrarán las mayores inversiones futuras.
La secuencia de la casi veintena de anuncios iniciada en febrero de 2020 abarca desde la presentación de la empresa Bio Organic que está invirtiendo en San Juan unos US$ 500.000 (50 millones pesos argentinos) para dar valor agregado a la turba fueguina, de la cual el país es el segundo productor en el mundo después de los canadienses.
Desde entonces los anuncios se sucedieron a manos del consorcio Barrick Gold-Shandong Gold para la extensión de la vida útil de la mina de oro y plata Veladero, por unos U$S 225 millones, mientras que en El Quevar (Salta) anuncio otros U$S 10 millones para la explotación de plata.
Inversiones de las empresas
La firma canadiense Aldebarán presentó su plan de inversión por U$S 8,4 millones para la exploración del proyecto minero Altar, también de cobre; en tanto que la construcción de la minea Lindero (Salta) demandara otros U$S 320 millones.
El ritmo de anuncios se aceleró a partir de la decisión de reducir las retenciones al topo del 8%, a lo que siguió una inversión adicional a la extensión de la vida útil de Veladero por U$S 628 millones, mientras que la minera Yamana hacía lo propio en Catamarca para el proyecto Mara, de cobre oro y plata. por una inversión de U$S 120 millones en tareas exploratorias.
En el segmento del litio se destacan las presentaciones de la empresa Orocobre-Toyota -a través de la empresa Sales de Jujuy- por unos US$ 450 millones; de la empresa Livent como proveedora de la automotriz BMW por US$ 974 millones, en el proyecto del Salar del Hombre Muerto, en Catamarca.
La empresa Hanaq, por su parte, anunció inversiones de US$20 millones en la mina Provindencia en la provincia de Jujuy, mientras que Orocobre, en asociación con la empresa Galaxy plantearon el proyecto de refinado de litio, en Catamarca, por U$S 150 millones.
El resto de los proyectos puestos en marcha son los de la empresa Ganfeng para la mina Mariana (salta) por US$ 580 millones, la iniciativa de YPF Litio en Jujuy por US$ 2,5 millones; Neo Lithium-Zijin en Salta para el emprendimiento Tres Quebradas por US$ 770 millones y el más reciente Centenario Ratones (Salta) U$S 400 millones que desembolsará la empresa Eramet.
En tanto, desde la Secretaría de Minería se precisó que de los datos que surgen del artículo 18 de la Ley 24.196 de Inversiones Mineras, las declaraciones juradas correspondientes a los desembolsos efectivamente realizadas durante el ejercicio 2020, también precisan el destino de los mismos.
Así, los datos muestran que las empresas inscriptas en el régimen promocional invirtieron un total de US$ 1.165,8 millones, distribuidos en Exploración (US$ 201,1 millones); Construcción y Ampliación, USD 619,8 millones; y Sostenimiento, USD 344,8 millones.
Según las declaraciones juradas del Artículo 25 correspondientes a las inversiones proyectadas para todo 2021, las beneficiarias del régimen declaran un incremento del 14% de las inversiones globales respecto al año anterior, que alcanzaría los USD 1.327,3 millones.
Esas inversiones permiten observar para el año un desagregado en: Exploración, US$ 243,2 millones; Construcción y Ampliación, USD$522,2 millones; y Sostenimiento, US$ 561,9 millones.