Aníbal Borderes, presidente de la Asociación de Fábricas de Automotores instaladas en Argentina, indicó que los últimos datos muestran un incremento de la producción de más de 20% interanual en la primera quincena de agosto. El país sudamericano tuvo su récord de producción en 2010.
Buenos Aires. La industria automotriz argentina aumentaría su capacidad de producción a un millón de unidades en 2012, tras lograr este año un récord de fabricación de 840.000 autos por la gran demanda interna y la exportación a Brasil, dijo este viernes una fuente del sector.
Aníbal Borderes, presidente de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) instaladas en Argentina, indicó en una entrevista con Reuters que los últimos datos de la industria muestran un incremento de la producción de más de 20% interanual en la primera quincena de agosto.
El país sudamericano tuvo su récord de producción automotriz en 2010 con 724.023 unidades.
"El 2011 está trayendo un buen ritmo, mes a mes estamos batiendo récord de producción y de ventas, con lo cual este año creemos que vamos a terminar también en niveles récord de exportación", afirmó el ejecutivo.
Sostuvo que "en base a las inversiones realizadas y a las nuevas, la capacidad se amplía. Estamos sembrando para poder llegar al millón de unidades (...) Esta capacidad podría estar en el 2012, el volumen final dependerá de la demanda y para eso es bueno estar mirando de cerca a Brasil, nuestro principal motor de las exportaciones".
Bajos niveles de ventas de automóviles a crédito aún limitan una mayor expansión de la industria, dijo Borderes.
Apenas entre 25% a 30% de las ventas de cero kilómetro se realizan mediante crédito, muy lejos del nivel de países vecinos, donde la financiación a 60 ó 70 meses responde por cerca de 70% de las ventas.
Advertencia externa. La dudas actuales sobre la salud de la economía estadounidense y de las finanzas europeas hacen redoblar esfuerzos de la industria argentina para no perder mercados.
Borderes afirmó que una pequeña desaceleración en el ritmo económico de Brasil, no debería afectar "muy fuertemente" a la industria nacional de autos.
"Evidentemente toda desaceleración te prende una luz amarilla. Una pequeña desaceleración en Brasil no debería en principio afectarnos muy fuertemente a nosotros", afirmó.
El jefe de Adefa dijo que uno de los objetivos de la industria es el aumento de la competitividad, en momentos en que la inflación en Argentina medida por analistas privados se ubica en torno al 25% anual.
"El tipo de cambio (argentino) para los negocios con Brasil es competitivo, ahora para otros países debemos trabajar bastante. Nosotros no medimos en retraso cambiario sino los costos en pesos (...) hay que medir un poco más las eficiencias internas y la productividad", dijo Borderes.
Las automotrices argentinas planean una inversión en torno a los US$1.200 millones entre 2010 y 2012, en un sector que representa el 1% del Producto Interno Bruto (PIB), y en torno al 6% del PIB industrial.
El 60% de la producción argentina de autos se exporta a 44 países, de los cuales el 90% va dirigido a Brasil, siendo México es el segundo mercado en importancia.
El 13% de las exportaciones totales de Argentina provienen del sector automotor.
Argentina ocupa el puesto 20 a nivel global en la producción de autos, mientras que Brasil es el cuarto en ese ránking.