Una vez concluido, el gasoducto puede resultar vital para aliviar las deficitarias cuentas públicas de Argentina, gracias a una reducción en las importaciones de energía y a las divisas frescas que generarían las exportaciones de gas.
El Gobierno argentino publicó este miércoles una resolución para avanzar en la construcción del gasoducto troncal desde la formación Vaca Muerta, una obra clave para revertir el déficit energético del país, según se publicó en el boletín oficial.
La resolución de la Secretaría de Energía declara de interés nacional la construcción del gasoducto Néstor Kirchner, que partirá con gas natural desde Tratayén en la provincia de Neuquén, donde se encuentra Vaca Muerta, y atravesará las provincias de Río Negro, La Pampa y Buenos Aires, hasta Santa Fe.
Una vez concluido, el gasoducto puede resultar vital para aliviar las deficitarias cuentas públicas de Argentina, gracias a una reducción en las importaciones de energía y a las divisas frescas que generarían las exportaciones de gas.
"En la actualidad la capacidad de transporte de los tres gasoductos que unen la cuenca Neuquina con los grandes centros de consumo se encuentra prácticamente saturada", dijo el secretario de Energía, Darío Martínez, en la resolución.
Debido a ello, "los productores de gas de dicha cuenca no pueden ni podrán seguir incrementando su producción más allá de unos cinco a seis millones de metros cúbicos diarios adicionales, precisamente por imposibilidad de evacuarla".
Como adelantó Reuters en diciembre, la resolución establece que la ejecución de las obras se realizará a través de IEASA, una empresa pública que gestiona proyectos y obras de infraestructura energéticas.
La construcción requerirá, en una primera etapa, unos 18 meses de trabajo y una inversión pública de unos US$ 1.590 millones para inyectar 24 millones de metros cúbicos más por día de gas en la red para el invierno de 2023, explicó a Reuters una fuente del Gobierno en diciembre.