Las autoridades mantendrán el suministro de gas residencial pese a que para ello ha tenido que recurrir a cortes programados a empresas en medio de una ola de frío que golpea a gran parte del territorio.
Buenos Aires. Argentina mantendrá el suministro de gas residencial pese a que para ello ha tenido que recurrir a cortes programados a empresas en medio de una ola de frío que golpea a gran parte del territorio, según una nota el martes del ente estatal regulador del sector.
Desde hace poco más de un mes grandes empresas industriales se han visto afectadas por restricciones en el suministro, que portavoces gubernamentales han justificado como una forma de planificar la demanda de gas natural cuando crece el consumo por las bajas temperaturas.
"Estas restricciones se vienen registrando desde que se estableció el sistema de gas natural en la Argentina, razón por la cual no deben sorprender las medidas que se han adoptado en resguardo de los usuarios residenciales", dijo el Ente Nacional Regulador del Gas (Energas).
Este tipo de medidas se ha hecho habitual en Argentina en los últimos años en la temporada invernal. Incluso, ha habido necesidad de importar gas, petróleo y electricidad, así como frenar las ventas externas de gas y penalizar el alto consumo doméstico para asegurar el suministro interno.
"Las restricciones que se están aplicando a las empresas con contratos interrumpibles, empresas con contratos en firme con ventana y las grandes industrias están totalmente planificadas y permanecerán hasta que se reviertan las actuales condiciones climáticas, con una mejora en la temperatura", dijo Energas en un comunicado.
Analistas afirman que el abastecimiento de gas y electricidad en el país sudamericano está limitado por un retraso en las inversiones del sector.
Una ola de frío está golpeando a países sudamericanos como Argentina y Chile.