Pablo Andreani, analista de la consultora AgriPac, advirtió que "el mercado va camino de perder US$50 por tonelada ante la menor demanda de la industria y la mejora productiva, tras las lluvias".
La demora de los productores de soja en vender sus existencias de la oleaginosa, estimada entre 6 y 8 millones de toneladas, redundó en una fuerte pérdida de rentabilidad en los últimos días, según un analista del sector.
Pablo Andreani, de la consultora AgriPac, señaló que las últimas lluvias ampliaron la expectativa de una mejor cosecha del grano, con una contrapartida de precios más bajos, lo cual se reflejó en el Mercado de Chicago con las recientes caídas de 10 dólares para la posición enero, 8 para marzo y 7 dólares para mayo.
Esa baja ya estaba "anunciada" meses atrás y los productores, "que ya estaban preavisados de lo que podía suceder, han perdido entre 180 y US$240 millones", estimó Andreani.
El experto evaluó en su informe semanal: "Estamos ante el síntoma de los productores de `panza llena´".
Cuando la soja disponible se cotizaba arriba de los US$350 -señaló Andreani- muchos decían: "Si no hay necesidad, para qué voy a vender"; "si vendo no sé qué hacer con los pesos"; o "si vendo antes del 31 de diciembre me entra en el balance de 2013".
Para el analista, "todas estas son frases que se originan en la ignorancia empresaria, en no conocer que existen herramientas y formas de estar cubiertos con el valor en dólares".
Mientras tanto, advirtió, "el mercado va camino de perder US$50 por tonelada ante la menor demanda de la industria y la mejora productiva, tras las lluvias".
Entre el último día de diciembre y el primero del año llovieron en promedio de 30 a 60 milímetros que cubrieron el 80% de las áreas de soja y el 70% de las zonas productoras de maíz, puntualiza el análisis.
Precisamente, concluye Andreani, la ausencia previa de lluvias es lo que sostuvo el precio de la soja de la nueva cosecha durante el último mes, luego de que se mantuviera "flotando en los 300 dólares" desde octubre pasado.