Según una resolución del Ministerio de Energía, se dispuso la entrega a las empresas petroleras de una compensación equivalente a US$7,5 por barril para sus embarques al exterior del crudo producido en la cuenca del Golfo de San Jorge, en la patagonia argentina.

Buenos Aires. El Gobierno argentino dijo el viernes que otorgará un subsidio a las exportaciones de crudo mientras los precios globales estén por debajo de los US$47,5 por barril, en función de mantener la inversión en el sector local en momentos en que el país necesita divisas para impulsar su economía.

Según una resolución del Ministerio de Energía, el Gobierno de centroderecha que asumió en diciembre dispuso entregar a las empresas petroleras una compensación equivalente a US$7,5 por barril para sus embarques al exterior del crudo producido en la cuenca del Golfo de San Jorge, en la patagonia argentina.

Ante el reciente desplome de los precios globales, "resulta necesario aplicar medidas de estímulo específicas que atenúen el impacto de tales disminuciones sobre el nivel de actividad y empleo locales, a fin de mantener las pautas de inversión previstas por el sector productor", señaló la resolución.

El subsidio, cuya referencia son los futuros del crudo Brent, no aplicará cuando ese precio supere los US$47,5 por barril en los dos días previos y los dos posteriores a la fecha de la exportación, precisó el Gobierno.

El viernes, los futuros del Brent subían a US$40,42 por barril, respaldados por un reporte optimista de la Agencia Internacional de Energía y por la debilidad del dólar, que hace que el combustible sea más barato para importadores que usan otras divisas.

Las autoridades de Argentina determinan el precio que las refinerías pagan por el crudo a las petroleras que operan en el país con el fin de sostener la producción doméstica de hidrocarburos.

La cuenca del Golfo de San Jorge, una variedad pesada, produce entre 41.000 y 43.000 metros cúbicos de crudo pesado por día. Las compañías que operan en esa región incluyen a la petrolera estatal YPF y Pan American Energy. El presidente Mauricio Macri llegó al poder hace tres meses con la promesa de reactivar una economía estancada desde hace años por un alto nivel de inflación y por escasez de inversiones tras más de una década de políticas intervencionistas.

Entre las medidas ya adoptadas, el Gobierno de Macri ha eliminado restricciones e impuestos a la exportación de productos agrícolas e industriales, devaluado con fuerza la moneda local y liberado las importaciones de los severos controles vigentes anteriormente.