La estatal Enarsa está ahora encargada de las compras del fluido, que financia en parte con fondos públicos que son cada vez más escasos en momentos en que la economía se desacelera.
Buenos Aires. El gobierno argentino busca que la petrolera YPF concentre la importación de gas natural una vez que sea expropiada, dijo este jueves un legislador, lo que podría ahorrarle al Tesoro miles de millones de dólares al año.
La estatal Enarsa está ahora encargada de las compras del fluido, que financia en parte con fondos públicos que son cada vez más escasos en momentos en que la economía se desacelera.
El Tesoro nacional planea girarle este año unos US$2.300 millones a la compañía para que haga frente a la importación de gas natural desde Bolivia y adquiera decenas de cargamentos de gas natural licuado (GNL).
Pero ese escenario podría cambiar. El Senado dio media sanción en la madrugada de este jueves a un proyecto del gobierno para expropiar el 51% de las acciones de YPF, la mayor petrolera del país, en manos del grupo español Repsol.
Se espera que la Cámara de Diputados lo convierta en ley la próxima semana.
"Una vez que entre en funcionamiento esta ley, YPF seguramente deberá absorberla, no deberá existir más Enarsa si tenemos una empresa específicamente que se va a ocupar de este tema", dijo el senador oficialista Aníbal Fernández en la medianoche del miércoles, durante el debate en el Senado.
Fernández no dijo si el Estado seguiría financiando la compra de GNL cuando YPF asuma el rol de importador.
Pero analistas creen que el fuerte aumento de las importaciones energéticas y la escasez de dólares en Argentina son una gran tentación para que el Tesoro se libere de esa carga.
"En estas cuestiones es dónde se va a ver si YPF va a ser un actor que siga cierta estrategia que marca el Estado pero con la visión de un gestor privado, o va a empezar a hacer este tipo de negocios", declaró el analista energético Víctor Bronstein.
En un informe distribuido la semana pasada, Barclays manifestó que uno de los escenarios posibles para YPF es que el gobierno utilice su flujo de caja para financiar gasto público.
El gobierno acusa a Repsol de no haber invertido lo suficiente para revertir una brusca caída de la producción de hidrocarburos que obligó a Argentina a realizar millonarias importaciones energéticas que drenan su superávit comercial.
La expropiación de YPF fue fuertemente criticada por la Unión Europea y los inversores internacionales, que ven un avance en la política de intervencionismo del gobierno en la economía.
Enarsa esta ahora adquiriendo el GNL a unos 15,5 dólares/mmBtu en el mercado internacional y vende gas en el mercado local a alrededor de 4 dólares/mmBtu. El Estado financia la diferencia.
La petrolera fue creada en el 2004 para cubrir el creciente costo del gas importado y atender las necesidades de los consumidores y de las empresas, una política introducida tras una dura crisis económica de hace una década.
Enarsa ofreció recientemente pagar embarques de GNL con biodiésel.
Suministro en peligro. Enarsa preveía adquirir este año un récord de 80 cargamentos de GNL, pero a fines de febrero sólo tenía asegurados poco menos de 60 debido a que los altos precios que pedían los proveedores le obligaron a rechazar ofertas.
Uno de sus principales proveedores es Repsol, que este año tiene comprometidos 10 buques.
Operadores en el mercado energético dijeron que existe el riesgo de que Repsol suspenda esos envíos como represalia por la expropiación de su participación en YPF.
"Para mí existe el riesgo de un escenario negro de que el GNL de España desaparezca", explicó un operador bajo condición de anonimato.
Argentina podría sufrir de desabastecimiento de gas natural el próximo invierno austral si Repsol cancela sus cargamentos.
No había nadie disponible en la petrolera española para comentar sobre esa posibilidad.
La española Gas Natural, Morgan Stanley y la japonesa Marubeni son otros habituales proveedores de GNL a Argentina.
A inicios de abril, Enarsa lanzó una nueva licitación para adquirir cuatro cargamentos con entrega en mayo, junio y agosto.
Las acciones de YPF cerraron el jueves con un alza del 4,85% en Buenos Aires.