Sin importar cuánto petróleo se pueda producir a nivel local, la economía estadounidense es vulnerable al riesgo de los vaivenes en los precios globales ante conflictos o recortes en la producción en Oriente Medio, dijo un grupo de presidentes ejecutivos y jefes militares retirados.
Washington. Un fuerte superávit en la producción de energía de Estados Unidos pone al país en riesgo de ignorar la necesidad urgente de transformar su sector de transporte para depender menos del petróleo y más de la electricidad y gas natural, dijo este lunes un grupo de presidentes ejecutivos y jefes militares retirados.
Sin importar cuánto petróleo se pueda producir a nivel local, la economía estadounidense es vulnerable al riesgo de los vaivenes en los precios globales ante conflictos o recortes en la producción en Oriente Medio, afirmó el grupo.
"Advertimos que la situación no ha cambiando en forma fundamental, y que sería peligroso permitir que una falsa sensación de seguridad resulte en la complacencia y la inacción", dijo el Consejo de Liderazgo en Seguridad Energética el lunes en un informe.
Las recomendaciones llegan al tiempo que Washington busca formas de elevar ingresos y recortar el gasto para lidiar con la enorme deuda estadounidense sin dañar la economía, que sigue avanzando a un bajo ritmo de crecimiento.
Contra ese trasfondo, el sector energético ha sido uno de los pocos puntos positivos, elevando el empleo, dando vida nueva al sector manufacturero y contribuyendo a los ingresos del gobierno.
El alza en la producción ha sido tan fuerte que Estados Unidos está en camino a superar a Arabia Saudita como principal productor para el 2017 y estaría cerca de la autosuficiencia energética hacia el 2035, pronosticó la Agencia Internacional de la Energía este mes.
Sin embargo, el consejo advirtió que debido a su "excesiva dependencia en el petróleo", la independencia energética de Estados Unidos es "insignificante desde un punto de vista práctico" debido a que los precios del petróleo son determinados a nivel global.
Eso significa que Estados Unidos podría estar en problemas para incrementar su crecimiento económico si hay repuntes regulares en los precios del crudo.
El consejo es liderado por el general retirado P.X. Kelley, un ex comandante de la marina, y Frederick Smith, presidente ejecutivo de la enorme compañía de correo FedEx Corp, cuyo negocio es muy sensible a los costos del transporte.
El Consejo instó a la administración y a los legisladores a tomar medidas para estimular más la producción de energía, incluida la revisión del plan quinquenal de perforación costa afuera, y reformar la burocracia de permisos para los proyectos energéticos más importantes, como en perforaciones, energías renovables, líneas de transmisión y ductos.
"Hoy en día, la regulación es muy a menudo un proceso opaco que sirve para disuadir la inversión del sector privado por medio de retraso prácticamente ilimitada", dijo el consejo.
El Comité recomendó que la Oficina de la Casa Blanca de Asuntos de Información y Regulación sea responsable de supervisar los permisos para proyectos de energía principales, y se establezca una línea de tiempo máximo de 30 meses para una revisión federal de proyectos.