Las quejas, expuestas ante la FTC, fueron planteadas hace más de un año por el multimillonario William Ackerman, quien acusa directamente a Herbalife de emplear un sistema ilegal de carácter piramidal para obtener sus ingresos.
Emen. La Comisión Federal de Comercio (FTC, en inglés) abrió una investigación a la multinacional Herbalife, a la que acusa de esconder en realidad un sistema ilegal piramidal para su financiación, reseñó Últimas Noticias citando un cable de EFE.
"Herbalife da la bienvenida a la investigación dada la tremenda cantidad de desinformación existente en el mercado, y cooperará completamente de la FTC", aseguró hoy la compañía de suplementos nutritivos en un comunicado.
La cotización de las acciones de la empresa se detuvo durante media hora al darse a conocer la investigación por parte de la agencia federal, y una vez reanudada los títulos de Herbalife cerraron la sesión con un descenso del 7,36%.
Las quejas, expuestas ante la FTC, fueron planteadas hace más de un año por el multimillonario William Ackerman, fundador de los fondo de inversión Pershing Square Capital Management, quien acusa directamente a Herbalife de emplear un sistema ilegal de carácter piramidal para obtener sus ingresos.
El pasado enero, el senador de Massachusetts Edward Markey envió un carta a la Comisión de Valores y a la FTC para que se examinaran las prácticas empresariales de la compañía.
El mes pasado, también la coalición hispana LULAC y otros grupos defensores de las minorías pidieron a las autoridades federales y al Congreso analizar las operaciones de Herbalife y la acusaron de prácticas "fraudulentas" que afectan más a las minorías.
Hasta ahora, y apoyada por algunos inversores, como George Soros y Carl Icahn, Herbalife siempre ha rechazado las acusaciones.
"Estamos confiados en que Herbalife cumple todas las leyes y regulaciones aplicables", agregó en el comunicado la empresa.
Herbalife se dedica a la comercialización de suplementos vitamínicos y para la pérdida de peso a través de una red de distribuidores independientes.
En 2013 registró unas ventas US$4.800 millones, por encima de los US$4.100 millones registrados en 2012.