El ministro panameño de Gobierno, Milton Henríquez, explicó que el avance en estas conversaciones, a través de una comisión gubernamental, permitieron que los trabajadores ingresaran al lugar para trabajar en el proyecto Barro Blanco.
Panamá. El ministro panameño de Gobierno, Milton Henríquez, informó hoy que existe un avance en el diálogo con grupos indígenas que se oponen a las obras de una hidroeléctrica en el noroeste del país, por considerarla perjudicial para sus comunidades.
Henríquez explicó a través del canal local de televisión Telemetro que el avance en estas conversaciones, a través de una comisión gubernamental, permitieron que los trabajadores ingresaran al lugar para trabajar en el proyecto Barro Blanco.
La obra fue suspendida el pasado 9 de febrero por la entonces Autoridad Nacional del Ambiente (Anam), ahora Ministerio de Ambiente, debido a incumplimientos en el Estudio de Impacto Ambiental.
El proyecto desarrollado en el sector rural de Tolé, provincia de Chiriquí, fronteriza con Costa Rica, por la empresa Generadora del Istmo S.A. (Genisa), de capital centroamericano, se encuentra en su etapa final.
Los representantes de Genisa aseguraron que la obra, cuya inversión se calcula en 120 millones de dólares, ha sido severamente perjudicada al no poder avanzar en aspectos técnicos-estructurales y financieros.
Henríquez alertó que una laguna formada por el embalse del proyecto puede afectar a las familias indígenas gnöbe buglé en áreas anexas y reitero que, de no terminar de construirse la presa del proyecto, se corre el riesgo de derrumbes en la estructura y de inundaciones.
Enfatizó que el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, planteó la conclusión de las obras, sin embargo no se cerrarán las compuertas respectivas hasta que no haya un acuerdo con las personas que puedan ser afectadas.
Henríquez señaló que el gobierno espera alcanzar un acuerdo, mientras los trabajadores terminan con la obra.
Agregó que en caso de que sea necesario, por el tiempo que se requiere para lograr acuerdos y poner en operación la hidroeléctrica, el gobierno puede considerar adquirir la estructura para que otros empresarios puedan comprarla.
El titular del Ministerio de Gobierno subrayó que es preciso que la obra esté terminada para poder dar el paso siguiente, en caso de una eventual compra.
Explicó que tiene informaciones sobre posibles daños provocados a una clínica de Genisa en Barro Blanco, sin embargo dijo que se está esperando un informe al respecto.
El ministro aseguró que lo ocurrido en este caso muestra la importancia de que haya desde un principio las consultas necesarias para el desarrollo de este tipo de proyectos.