El fondo contribuirá a la agenda de energía (Agenda de Energía. Un Desafío País, Progreso para Todos) y a la Política Energética (Energía 2050) de Chile, cuyo objetivo es impulsar el uso de energías renovables no convencionales (ERNC) y reducir el costo de la electricidad.
Washington. El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial aprobó este lunes una donación de US$1,78 millones del Fondo para una Tecnología Limpia (CTF) para fortalecer la capacidad del Ministerio de Energía chileno para desarrollar el sector geotérmico y contribuir con ello a la seguridad energética del país.
El fondo contribuirá a la agenda de energía (Agenda de Energía. Un Desafío País, Progreso para Todos) y a la Política Energética (Energía 2050) de Chile, cuyo objetivo es impulsar el uso de energías renovables no convencionales (ERNC) y reducir el costo de la electricidad. El cuantioso potencial geotérmico de Chile representa una buena opción energética renovable para diversificar la oferta de generación de energía del país y reducir la volatilidad de los precios.
El Gobierno de Chile ha realizado un esfuerzo concertado para desarrollar su naciente industria de energía geotérmica. Sin embargo, pese a lo que parecía ser un comienzo prometedor, algunos problemas representaron obstáculos infranqueables para las inversiones en exploración.
El presente proyecto apunta a subsanar barreras específicas con el fin de mejorar las condiciones del mercado de la geotermia. Al derribar importantes barreras legales, sociales y del mercado, esta asistencia técnica contribuirá al desarrollo de los recursos geotérmicos comerciables. El desarrollo a largo plazo de estos recursos supondría un beneficio para los consumidores chilenos.
Estos esfuerzos contribuirán a reducir y estabilizar los precios energéticos, lo cual reportará beneficios económicos a las empresas, al igual que a los consumidores tanto industriales como residenciales. Además, los habitantes de la zona del proyecto geotérmico, incluyendo los de origen indígena, se beneficiarán de los servicios industriales, las posibilidades de empleo y una mejor conectividad, así como de otras ventajas asociadas al desarrollo del sector.
“El desarrollo de la tecnología geotérmica permite que Chile atienda una demanda energética en alza, provea seguridad energética de un modo ambientalmente sustentable, impulse la competitividad económica del país y promueva las inversiones en zonas rurales remotas, donde existe una mayor concentración de pobreza”, manifestó Alberto Rodríguez, Director del Banco Mundial para Bolivia, Chile, Ecuador, Perú y Venezuela.
La entidad ejecutora responsable será el Ministerio de Energía, con apoyo de la Agencia Chilena de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AGCI), una entidad del Ministerio de Relaciones Exteriores. La donación de US$1,78 millones tendrá un plazo de ejecución de cuatro años.