Mientras gigantes regionales como el brasileño Itaú Unibanco aseguran que los precios de los activos en América Latina son aún demasiado altos como para sacar la chequera, GrupoSura y Corpbanca no titubearon.
Reuters. La aguda crisis económica en Europa está dejando a los grupos financieros latinoamericanos frente a lo que podría ser un gran banquete.
La necesidad de los bancos del Viejo Continente de juntar fondos para hacer frente a las mayores exigencias de capital, o para cubrir los baches que dejó la explosión de burbujas inmobiliarias, los obliga a salir de una región que sigue mostrando sólidas perspectivas de crecimiento.
Mientras gigantes regionales como el brasileño Itaú Unibanco aseguran que los precios de los activos en América Latina son aún demasiado altos como para sacar la chequera, GrupoSura y Corpbanca no titubearon.
Durante el Foro de Reuters sobre Inversión en América Latina, ambos bancos -que ya compraron la filial colombiana de Santander y los fondos de pensiones del holandés ING en toda la región- dijeron ahora estar listos para evaluar una oferta por las aministradoras de jubilaciones del español BBVA, un negocio que gestiona una cartera de US$55.000 millones.
