Banqueros resaltaron que una prioridad es que haya un crecimiento del crédito con calidad y que sea sostenible.
Excelsior.com.mx. De cara a la discusión de la reglamentación de la Reforma Financiera, el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Javier Arrigunaga, planteó la necesidad de que las autoridades y los legisladores antepongan la estabilidad del sistema financiero a la competencia y consideren “entre los ingredientes importantes” de estas reglas que no se trastoque la vocación de cada institución.
En entrevista con Excélsior el líder de los banqueros resaltó que una prioridad tanto para autoridades del sector, como para las propias instituciones es que haya un crecimiento del crédito con calidad y que sea sostenible.
“Los elementos que nos parecen importantes es que se cuide la vocación de cada institución y así entendemos que hay bancos de nicho, hay bancos que se dedican a participar más en mercados, bancos con cobertura nacional y que prestan todo tipo de servicios. Esperamos poder participar en el desarrollo de estas reglas”, aseguró.
Como parte de la Reforma Financiera, la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) realizará un análisis sobre las condiciones del mercado con el fin de evaluar la cantidad de crédito que otorgan las instituciones y qué tanto están cumpliendo con la función para la cual obtuvieron licencia.
En beneficio de los clientes
A unos días de encabezar por segunda ocasión la Convención Bancaria, el representante del gremio destacó que en materia de competencia se han registrado avances importantes en los últimos años, como una mayor transparencia y movilidad para los clientes.
Detalló que la competencia en el sector bancario es más dinámica que en otras industrias de la economía como la automotriz e incluso mencionó que México tiene más participantes en este mercado si se compara con otros países como Brasil, Australia, Nueva Zelanda o Canadá.
Javier Arrigunaga comentó que respecto del estudio que entregará la Comisión Federal de Competencia Económica en los próximos meses sobre las condiciones del mercado bancario, existe una disposición absoluta de los bancos a brindar toda la información que se requiera.
No obstante, insistió que como parte de estos análisis, es necesario que las autoridades correspondientes dimensionen la estabilidad y solidez que ha ganado el sistema bancario en los últimos años.
Sobre el posible tope a la compra de bonos gubernamentales como una medida que orille a los bancos a prestar, señaló que esto sería resultado de la evaluación que se realice sobre el nivel de crédito otorgado por las instituciones bancarias.
Sin embargo, señaló que hasta ahora los bancos ya canalizan a través del crédito el total de los recursos que el sector capta mediante el ahorro.
“Entiendo que el concepto que está detrás es que los bancos canalicen los depósitos efectivamente al otorgamiento del crédito, pero hoy ya se presta 100% de los depósitos”, enfatizó.
Posible, duplicar crédito
El presidente de la Asociación de Bancos de México resaltó que dadas las condiciones macroeconómicas y la aprobación de la Reforma Financiera, es alcanzable la meta de duplicar el crédito en los próximos 10 años.
Agregó que “en la medida en que sea más fácil la recuperación de los créditos, también va a ser más fácil hacer que el crédito llegue a sectores más amplios”, mientras que para que sea más barato, es necesario fomentar la competencia.
“Con un ritmo como el que tenemos de aumentar el crédito tres veces por encima del crecimiento económico podríamos estar alcanzando niveles de 40% del PIB en ocho años”, subrayó.
El representante de los banqueros expresó que ya se tienen los fundamentales para el crecimiento del crédito, como lo es la estabilidad macroeconómica, y que además se ha convertido en elemento distintivo de México; por lo que aunado a la implementación del paquete de reformas económicas estructurales aprobado durante 2013 y la formalización de la economía, las condiciones están dadas para el incremento de la penetración crediticia.
Antifraude una tarea de cada banco
Para abatir los hechos fraudulentos y actividades de procedencia ilícita relacionadas con las operaciones bancarias, no sólo es necesario que las instituciones intensifiquen sus medidas de prevención y aumenten los controles, sino que se fortalezca el Estado de Derecho en la actividad económica, aseguró Javier Arrigunaga, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).
“Tiene que ver con el fortalecimiento del Estado de Derecho que también tiene una dimensión en términos de combatir la impunidad en casos de presuntos fraudes. Eso es algo en lo que tenemos que seguir avanzando”, resaltó.
El también director general del Grupo Financiero Banamex admitió que es responsabilidad de cada institución en lo individual velar por su solidez a través de controles que impidan los fraudes.
Sin dar detalles sobre el fraude cometido por la empresa proveedora de Pemex, Oceanografía a Banamex —según lo informó la propia casa matriz Citigroup en su momento— por un monto de US$400 millones al haber presentado documentos falsos de la paraestatal para acceder a un crédito de este banco, Arrigunaga comentó que es evidente que cuando se registran fallas, cada institución tiene la obligación de corregirlas y fortalecer sus medidas preventivas.
“El riesgo operativo es parte de los riesgos que se consideran en Basilea y que cada uno de nosotros tiene que asumir”, insistió.
Cuestionado sobre el impacto que eventos como éste o el escándalo de lavado de dinero por el que atravesó HSBC hace un par de años y que lo llevó a pagar la mayor multa impuesta por una autoridad en el sistema financiero mexicano tienen sobre las instituciones bancarias, el representante del gremio reiteró que más que una falla del sector en su conjunto, es un asunto que debe resolver cada institución financiera.
En tanto, dijo, la banca continuará trabajando en los temas sobre los que se ha enfocado en los últimos años, como lo es la inclusión financiera.
Al respecto comentó que la Asociación, y los bancos en lo individual, continúan trabajando en encontrar la fórmula que le permita a la banca llegar a las zonas geográficas que hasta ahora no cuentan con infraestructura bancaria, aprovechando los nuevos canales como los corresponsales y la regulación en materia de simplificación de cuentas que permiten incrementar la cobertura sin tener costos transaccionales tan altos.