El banco sugirió a Argentina tomar diseño de contratos eólicos que firmó UTE con privados

Montevideo. La fuerte penetración que registraron las energías renovables en Uruguay con un rol clave de la inversión privada, es destacada y tomada como una "referencia" para el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que pone al "modelo uruguayo" como ejemplo para el camino que prevén transitar en esta materia países de la región como Argentina. El Observador dialogó desde Washington con Gema Sacristán, la directora general de Negocios de la Corporación Interamericana de Inversiones (CII), el mayor prestamista de proyectos energéticos públicos y privados que tiene Uruguay hasta el momento.

Para atraer las inversiones necesarias y transformar la matriz energética del país, el Grupo BID, a través de su brazo privado –recientemente reestructurado bajo la CII– aumentó fuertemente su presencia en el sector privado de Uruguay, complementando y fortaleciendo las actividades del gobierno.

Solo en Uruguay el banco multilateral de crédito canalizó recursos por US$ 425 millones y movilizó otros US$ 285 millones por medio de otras instituciones financieras para financiar proyectos eólicos y solares estatales y privados por una potencia instalada de unos 500 megawatts (mW).

"El Grupo BID ha jugado un papel bastante importante en la transformación de la matriz energética en Uruguay. En pocos años se ha convertido en el segundo país de Latinoamérica en energías renovables y uno de los mayores países de consumo de renovable no tradicional en el mundo", resaltó Sacristán. La ejecutiva destacó el salto que tuvo la energía eólica, que pasó de 0 megawatts en 2008 (mW) a 800 mw instalados a fines de 2015.

"Uruguay es un ejemplo de éxito de cómo transformar su matriz energética. Sinceramente creemos que han hecho bien las cosas con un marco regulatorio seguro que atrae a inversores institucionales. Eso es muy importante porque da mayores oportunidades", resaltó.

Agregó que Uruguay cuenta con un marco "contractual" que brinda seguridad jurídica. "Ahora que Argentina está desarrollando su marco contractual para las energías renovables, nosotros (por el BID) siempre le ponemos a Uruguay como un modelo a seguir", dijo Sacristán.

La funcionaria del BID destacó como un hito a nivel regional y mundial el hecho que Uruguay haya cubierto la totalidad de su demanda energética 100% con fuentes renovables en mayo. "El gobierno aplicó los cambios regulatorios necesarios para incrementar la participación del sector privado, desde desarrolladores, bancos institucionales y hasta los locales. Además, los inversionistas retail también están participando", valoró.

El papel del BID en Uruguay no solo se limitó a inyectar fondos para el desarrollo de proyectos sino que también aportó insumos para elaborar "licitaciones atractivas" para atraer a inversiones locales a internacionales. "Una cosa que ha hecho bien Uruguay y que es ejemplo de éxito para la región, es que han tomado su tiempo para las licitaciones fueran atractivas y llegaran a los inversores", explicó la directora general de Negocios de la CII.

El BID otorgó su expertise en el diseño de estructuras financieras "innovadoras" para el desarrollo de distintas iniciativas, así como el desarrollo de estándares medioambientales necesarios. También está brindando su apoyo a UTE en el diseño de las redes de transmisión que son necesarias para la conexión de los parques eólicos que están ingresando constantemente al sistema energético uruguayo.

"Ahora estamos haciendo cosas innovadoras en el mercado que están posicionando a Uruguay como uno de los países líderes en el desarrollo de este tipo de estructuras de financiamiento", resaltó la funcionaria del BID. Fue el caso del parque de UTE de Colonia Arias, donde una parte de la inversión del proyecto se abrió en un fideicomiso en la Bolsa de Valores de Montevideo para inversores minoristas.

Por otro lado, la última operación que realizó el Grupo BID en el parque Campo Palomas también tiene innovaciones en materia de financiamiento. En este caso la institución otorgó un "préstamo puente" que luego se va a refinanciar con una emisión en los mercados de capitales. Ese parque de 70 mW se desarrolla en Salto y demandará una inversión total de US$ 168 millones.

Esa granja eólica estaba a cargo de Abengoa, pero su crisis financiera llevó a que el BID acercará al grupo estadounidense Invenergy Wind para que adquiriera el proyecto y siguiera con la construcción del mismo.

"Lo que queremos es apoyar el desarrollo de los países en energías renovables, pero también jugamos un papel muy importante en traer inversiones regionales e internacionales para financiar los proyectos. El hecho de que el Grupo BID analice un proyecto da seguridad (a los inversores) para participar", explicó la ejecutiva de la CII.

La Corporación Interamericana de Inversiones (CII), miembro del Grupo BID, es un banco multilateral de desarrollo comprometido con el sector privado de América Latina y el Caribe, que comenzó a operar en enero.

La CII financia empresas y proyectos sostenibles para que alcancen resultados financieros y maximicen el desarrollo social y medioambiental en la región.

Con un portafolio de US$ 7.000 millones en activos y 330 clientes en 20 países, la CII provee soluciones financieras innovadoras y servicios de asesoría que responden a las demandas de sus clientes en una variedad de sectores.