China cerró sus importaciones de aceite de soja argentino, como respuesta a las restricciones que el país austral había impuesto antes a productos industriales chinos por competencia desleal.
Buenos Aires. La industriaprocesadora de soja de Argentina registra márgenes negativos deganancias desde que en abril China suspendió sus compras de aceitedel país austral, que ahora debe exportar más granos sin elaborar,dijo este viernes el titular de la cámara del sector.
Argentina, el mayor exportador mundial de los derivados de laoleaginosa, se vio obligada a colocar su aceite en otros mercados amenor valor como consecuencia del conflicto con China, que es elprincipal comprador global del producto.
"Estamos observando, desde el mes de abril de este año haciaacá, márgenes negativos dentro de la industria", señalóAlberto Rodríguez, el presidente de la Cámara de la IndustriaAceitera de la República Argentina (Ciara), durante una entrevistacon Reuters.
China cerró sus importaciones de aceite de soja argentinoargumentando que no cumplía con un estricto estándar de calidad,aunque luego admitió que la traba era una respuesta a lasrestricciones que el país austral había impuesto antes a productosindustriales chinos por competencia desleal.
"Este proceso (la disputa con China) ha provocado una menormolienda por parte de la industria comparada con la que debiéramoshaber tenido con este volumen de producción", dijo Rodríguez.
"La exportación de porotos sin elaborar nosotros estimábamosque podía estar rondando los 10 millones de toneladas (en el ciclo2009/10). Esas exportaciones están ya cerca de 13 millones yprobablemente terminemos en 14 millones. Eso es menor volumen quevamos a procesar, es un mes de molienda", explicó.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) estimó enseptiembre que las exportaciones de granos de soja de Argentina seránde 11,5 millones de toneladas.
EXCEDENTE
En los últimos cinco años, Argentina exportó en forma de granoscerca del 17 por ciento de su cosecha de soja, pero en la campaña2009/10 esa proporción podría subir al 22 por ciento, según elejecutivo.
De todos modos, las plantas procesadoras locales siguen moliendola soja para obtener la harina que venden a otros mercados, lo quegenera un excedente de aceite de la oleaginosa.
"Para vender ese excedente de aceite tuvimos que ir acompetir con, por ejemplo, el aceite de palma en la India, que es másbarato, es 50 o 70 dólares más barato. Y eso es el precio que seperdió", dijo el titular de Ciara.
India se convirtió a partir de abril en el principal mercado parael aceite de soja argentino en lugar de China, que aumentó suscompras a Brasil y Estados Unidos.
PESIMISMO
El auge en la producción de soja, que en el ciclo 2009/10 llegóal récord de 52,7 millones de toneladas, según el Gobierno, hizocrecer con fuerza en los últimos años el polo sojero situado en lossuburbios de la ciudad de Rosario, en el centro agrícola del país.
Compañías multinacionales como Louis Dreyfus, Cargill
o Bunge desarrollaron en el país plantas procesadoras con puertospropios que se encuentran entre las de mayor tamaño a nivel mundial,que ahora sufren una caída en sus ingresos.
"Hay otro caso que también afecta a la industria: hastaabril del año pasado podíamos traer soja de Paraguay, procesarla yreexportar los productos elaborados. Eso se hacía con 3 o 3,5millones de toneladas, pero se suspendió este sistema", afirmóRodríguez.
"Así que este año la producción de soja se fue aelaborarse a Europa. Lo que estamos haciendo con nuestra política esincentivar el procesamiento de soja en otros lados, como Paraguay oChina", agregó.
El ejecutivo elogió la iniciativa del gobierno argentino deaumentar la proporción que los combustibles locales deben tener debiodiésel, un fluido elaborado en base al derivado de la oleaginosa,pero la consideró insuficiente para compensar la pérdida delmercado chino, ya que sólo comprende al 10 por ciento del volumenexportado al gigante asiático.
"A largo plazo, eventualmente uno podría observar unreacomodamiento de los mercados. Que haya mercados que Brasil yEstados Unidos dejen de abastecer para abastecer a China y que esosmercados vengan a abastecerse en Argentina", expresó Rodríguez,quien, de todos modos, se mostró preocupado sobre el futuro delsector.
"Nuestra visión en estemomento es muy pesimista. Vamos a terminar el año con unautilización de la capacidad que va a estar alrededor del 70 porciento", contra el 80 por ciento normalmente usado, concluyó.