El acuerdo, que tiene una vigencia de 18 meses, fue suscrito este martes entre ejecutivos de Posco, Korea Resources Corporation (Kores), la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) y la Gerencia Nacional de Recursos Evaporíticos (GNRE).
La Paz. Con vistas a su incursión en el mercado mundial del litio, Bolivia suscribió un Principio de Acuerdo con el consorcio Kores-Posco para el desarrollo y producción de cátodos de ion de litio. La ejecución del demorado proyecto requerirá de una inversión inicial de US$1,5 millones.
Los objetivos principales del proyecto contemplan el diseño e implementación de una planta piloto de experimentación en producción de cátodos (como paso previo a la construcción de una planta industrial) y la selección de la tecnología “más apropiada y adecuada” para la instalación de una industria de materiales catódicos bajo la modalidad Joint Venture con el consorcio de Corea del Sur.
El acuerdo, que tiene una vigencia de 18 meses, fue suscrito este martes entre ejecutivos de Posco, Korea Resources Corporation (Kores), la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) y la Gerencia Nacional de Recursos Evaporíticos (GNRE), en presencia del ministro de Minería y Metalurgia, Mario Virreira, y el congresista Lee Sang-deuk (hermano del presidente surcoreano Lee Myung-bak).
Virreira remarcó el “peligro” que corre el proyecto estatal para la explotación e industrialización de los recursos evaporíticos del Salar de Uyuni, debido a las continuas demoras (ocho meses) ocasionadas por efectos climáticos, conflictos sociales y el incumplimiento de proveedores.
“Ahora que estamos firmando este acuerdo, estamos seguros de que vamos a correr muy rápido para alcanzar los niveles tecnológicos y productivos que nos permitan entrar al mercado internacional. Este compromiso marca ese punto de partida y con seguridad en muy corto tiempo veremos resultados positivos para el país”, dijo.
Aportes. Según el acuerdo, la Comibol suministrará a la sociedad materias primas y construirá la planta piloto con una inversión de US$750 mil; Posco aportará con ingeniería y construcción de la línea piloto, actividades en investigación y desarrollo y apoyo tecnológico; y Kores estará a cargo de la obtención de precursores y el respaldo económico para el suministro de materias primas. Ambas firmas surcoreanas darán un capital inicial de US$750 mil.
“Hemos recorrido un gran camino. El proyecto (boliviano) del litio ha tenido algunas demoras, pero ahora va a tomar velocidad y se desarrollará rápidamente con la producción de materiales catódicos hasta alcanzar la producción de baterías. Estoy convencido de ello”, sostuvo Sang-deuk.
“Tenemos que ver el mercado (del litio) a futuro y la República de Corea del Sur es pionera en la fabricación de vehículos. Estamos seguros (que esta alianza) servirá como punta de lanza en la inserción al mercado de vehículos que van a funcionar con energía que provenga de baterías de litio (boliviano)”, dijo a su vez Virreira.
Al respecto, el máximo ejecutivo de la GNRE, Luis Alberto Echazú, recordó que Posco mantiene una alianza estratégica con la empresa especializada en la producción de cátodos de ion de litio Fénix.
Una vez concluidas las dos etapas del proyecto, agregó el funcionario, “se verá el diseño de la planta industrial” y “se hará un contrato” para conformar una nueva sociedad con Kores y Posco.
Producción industrial en 7 años. El gerente Nacional de Recursos Evaporíticos de la Corporación Minera de Bolivia (GNRE-Comibol), Luis Alberto Echazú, informó este martes que para que el carbonato de litio de Bolivia alcance un nivel de producción industrial se requerirá de un período de “entre 6 a 7 años”.
Este año se comenzará con la producción semiindustrial de cloruro de potasio y la producción piloto del carbonato de litio. El financiamiento está garantizado por un crédito de US$879 millones del Banco Central de Bolivia (BCB).
Analizan alianza en fase de explotación. La Comibol abrió este martes la posibilidad de que otros países puedan participar en la explotación de los recursos evaporíticos de Bolivia, aprovechando la propuesta de Corea del Sur para participar también en esta fase del proceso de industrialización.
“Hay una segunda propuesta (de Corea del Sur) para hacer cátodos con la tecnología coreana, partiendo de nuestra salmuera, pero la dificultad es que ellos quieren arrancar desde abajo (desde la explotación) y ésa no es nuestra política, pero vemos que hay que abrir la mente y las posibilidades son muchas”, declaró el gerente Nacional de Recursos Evaporíticos de la Corporación Minera de Bolivia (GNRE-Comibol), Luis Alberto Echazú.
Bolivia pretende encarar la industrialización de los recursos evaporíticos en tres fases. En la primera (2012) se producirá a escala piloto 40 toneladas (t) de carbonato de litio y a nivel semiindustrial 1.000 t cloruro de potasio con una inversión de US$19 millones.
La segunda etapa (2014) apuntará a optimizar el proceso de industrialización del boro, magnesio y sulfato, así como el desarrollo de la tecnología necesaria para fabricar baterías.
La inversión se ampliará a US$485 millones y la producción anual se incrementará a 30 mil t de carbonato y 700 mil de cloruro.
La última fase (2016) contempla la fabricación de baterías con una inversión por parte del Estado de US$400 millones.
Para esta fase, Bolivia suscribió este martes un acuerdo con el consorcio surcoreano Kores-Posco para la construcción de una planta piloto de cátodos de ion de litio en Uyuni.
El convenio firmado con Corea del Sur “no significa monopolio ni exclusividad”, remarcó Echazú, a tiempo de recordar que los acuerdos firmados con Japón y China están en curso, pero que no registran avances significativos.