La directora ejecutiva de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi) aclaró que estas “actividades comerciales” que se ofertan a través de anuncios en los periódicos no están bajo el control y supervisión de la autoridad reguladora.

En los últimos meses, en Bolivia la oferta de préstamos entre particulares se incrementó y los intereses que se cobran por éstos llegan incluso hasta el 10% mensual. Una norma dispone que la tasa límite para ofrecer los préstamos es del 3% cada mes.

“¡Presto al cash (dinero en efectivo)...!!! Súper ágil y sin vueltas, todo monto de dinero de US$1.000 a US$50.000 amortizable...”. Anuncios como éstos son publicados en periódicos locales y de circulación nacional, y en páginas de internet, en los que se detallan varios teléfonos y correos electrónicos de contacto para acceder al servicio.

No hay más datos de las personas o de las “empresas serias” que brindan los préstamos, sólo precisan sus direcciones para que la ciudadanía consulte “sin compromiso” estas ofertas.

La Razón se contactó vía telefónica con algunos de los anunciantes y constató que la mayor parte de éstos ofrecen préstamos al público a tasas de interés que oscilan entre el 2% y el 3% a cambio de recibir como garantía casas, terrenos, departamentos, quintas (haciendas), maquinaria, vehículos, motocicletas, joyas y otros.

Además se verificó que otros anunciantes hacen préstamos sobre computadoras, televisores plasma, teléfonos inteligentes por un interés de hasta 10% mensual. Una de las personas afirmó que el cobro de esa cantidad elevada se debe a que los recursos otorgados son “pequeños”. En tanto, señaló que se disminuye la comisión entre el 2,5% y el 3% cuando los préstamos se realizan por cifras mayores a US$25.000 y US$30.000.

Todos los consultados afirmaron que la entrega del dinero es inmediata y que además dicha actividad comercial la realizan de forma constante. Dos negociantes coincidieron en que la actividad comercial se desarrolla en oficinas de inmobiliarias, empresas o sociedades que se dedican a la compra y venta de departamentos, casas y terrenos.

La directora ejecutiva de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi), Lenny Valdivia, aclaró que estas “actividades comerciales” que se ofertan a través de anuncios en los periódicos no están bajo el control y supervisión de la autoridad reguladora.

“En atención al buen momento económico que estamos pasando, se está dando un crecimiento de las casas de préstamo, pero éstas no están bajo el control de la Asfi”, señaló. Valdivia indicó que en algunos países este tipo de “actos de comercio” son controlados por el Estado y en otros no, porque eso depende del tamaño del mercado financiero.

La directora explicó que los préstamos entre particulares sólo representa una actividad ilegal cuando una persona natural o jurídica cobra un interés superior al 3% mensual, dispuesto por ley, incurriendo en el delito de usura, tipificado en el Código Penal. Por tal razón, manifestó que se puede iniciar un proceso legal contra estos individuos que cometen este delito.

Para el analista económico, Julio Alvarado, el aumento de los préstamos de “persona a persona” se debe a que el sector informal también creció y “existe más circulante en el país, la venta de recursos naturales generó más dinero y hay más liquidez”. El experto agregó que es posible que a través de la actividad se “lave dinero del narcotráfico y del contrabando”.

A decir del investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA), Carlos Arze, la gente recurre a estos préstamos con altos intereses por las urgencias personales que tiene y porque requiere el capital rápido, y para evitar los trámites que exige el sistema financiero. Pero “están sujetos a ser víctimas de usura”.

Asfi podría regular casas de empeño. La Asfi informó que analiza la posibilidad de regular las casas de empeño en todo el territorio nacional. “En este momento las casas de empeño no están bajo el control de la Asfi y estamos en un proceso de evaluación para ver si la situación actual de estos negocios amerita un control y qué tipo de supervisión”, sostuvo su directora ejecutiva, Lenny Valdivia.

El investigador del CEDLA, Carlos Arze, indicó que si se consolida esa medida, será positiva. “Deberían regularse todas las empresas, instituciones y sujetos que efectúan actividades que generan lucro, y aquellas que son susceptibles a la usura y especulación”.

Establecen los límites. El 31 de enero de 2004, el ex presidente Carlos Mesa autorizó, vía decreto, que el “límite máximo de la tasa de interés a la usura” sería de 2,5% mensual para todo el sistema financiero. La normativa disponía que la tasa de usura sería determinada periódicamente por decreto, dependiendo de las condiciones del mercado financiero.

Oferta de dinero en avisos de medios:

Anunciante 1: No identificado

“Le entregamos el dinero de forma inmediata, sólo necesitamos como garantía los papeles de su casa, su terreno o su vehículo, aunque éste se queda en un depósito. El interés es del 3% mensual, sin plazo fijo”.

Anunciante 2: No identificado

“Si su computadora vale US$1.500, le prestamos como mínimo Bs 700 y hasta Bs 1.000 con una tasa del 10% mensual, que son Bs 70 que es poco. Damos una tasa del 2% al 3% por préstamos de US$30.000”.

Anunciante 3: No identificado

“Somos una empresa seria que damos créditos desde US$2.000 en adelante a empresas y particulares al 3% de interés mensual. Recibimos casas, lotes, equipos pesados, que los guardamos en depósitos”.

Anunciante 4: No identificado

“Otorgamos préstamos sobre inmuebles y autos con un interés del 2,5% y del 3%. Tenemos socios que aprueban esa tasa. Damos créditos a comerciantes y tratamos de que el financiamiento sea continuo”.

Anunciante 5: No identificado

“El préstamo de Bs 10 mil se hace con una tasa del 4% mensual y en el plazo que defina. Si tiene un vehículo usted lo deja en un depósito como garantía hasta que pague su deuda y firmamos un contrato”.

Anunciante 6: No identificado

“Cualquier monto nosotros le prestamos con un interés del 2% mensual sobre su casa o vehículo, no hay comisiones, no hay un plazo fijo. Suscribimos un documento del préstamo y le doy el dinero”.