Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) dice que se entregarán unos ocho proyectos, entre grandes y chicos.

El gobierno de Bolivia tiene previsto invertir este año unos US$700 millones en la construcción, reconstrucción y mantenimiento de carreteras, 30% más que en 2013, cuando la inversión alcanzó los US$540 millones, informó el vicepresidente Álvaro García.

Los datos fueron dados a conocer el 20 de junio en el XII Congreso de la Cámara Boliviana de la Construcción (Caboco). “En 2013, de los US$540 millones planificados para carreteras, se han invertido US$480 millones, y para este año está planificada una inversión US$700 millones solo en carreteras”, dijo García.

En dicho evento estuvieron presentes las cámaras departamentales del sector, empresarios, entidades bancarias, profesionales independientes, instituciones nacionales e internacionales vinculadas al rubro y autoridades del los viceministerios de Transporte, de Vivienda, de Gobierno y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Consultado sobre esta inversión, el presidente ejecutivo de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), Antonio Mullisaca, precisó a La Razón el jueves que de los US$700 millones, 80% está destinado a la construcción de carreteras, 5% al mantenimiento y 15% a la reconstrucción de éstas.

“Entregaremos unos ocho proyectos, entre obras grandes y chicas. Por ejemplo una de éstas será la doble vía La Paz-Oruro, que entregaremos este año”.

Mullisaca señaló que “en números redondos” se construirán unos 3.000 kilómetros de carreteras, se mantendrán 12.000 kilómetros de vías y se reconstruirán 500 kilómetros de rutas.

Caboco pide condiciones

La Cámara Boliviana de la Construcción (Caboco) indicó que de acuerdo con la información sobre contratación pública de obras, se evidenció que éstas son adjudicadas en su mayoría a empresas extranjeras, en desmedro de las nacionales. Este pronunciamiento se lo hizo conocer en una nota en el XII Congreso de Caboco. En ese texto se señala que “gran número de las licitaciones concluyen declarándose desiertas y que la mayor parte de las obras con montos importantes son adjudicadas a las empresas extranjeras, en desmedro de las nacionales por falta de la obtención de las garantías”. Esta situación originó que Caboco solicite a las autoridades “generar condiciones” adecuadas que les permita participar en esas obras.