Una electricidad más barata ayudará a contener presiones inflacionarias el próximo año, cuando la economía brasileña debería acelerar su crecimiento.
Brasilia. Brasil anunció este martes planes para reducir los impuestos sobre las tarifas de la electricidad y abaratar el costo de la energía para industrias y clientes residenciales, la última medida de la presidenta Dilma Rousseff para revitalizar la estancada economía del país.
Rousseff dijo que los recortes de impuestos para generadores y distribuidores de energía, reportados por Reuters en mayo, rebajarían hasta un 28% las tarifas para los clientes industriales y un 16,2% para los residenciales. Los recortes entrarán en vigor en el 2013.
Una electricidad más barata ayudará a contener presiones inflacionarias el próximo año, cuando la economía brasileña debería acelerar su crecimiento. Y sobre todo, ayudará a las empresas brasileñas asfixiadas por altos costos de producción a mejorar su competitividad en el extranjero.
Las empresas brasileñas enfrentan el tercer mayor costo de electricidad del mundo.
Las medidas anunciadas este martes favorecerán a grandes consumidores como siderúrgicas, fabricantes de aluminio y petroquímicas.
"Lo que estamos haciendo es un proceso combinado con otras sinergias que garantizarán al país una década de crecimiento", dijo Rousseff en un discurso ante líderes empresariales en Brasilia.
Brasil, la sexta mayor economía del mundo, ha estado al borde de la recesión desde mediados del 2011, en la medida que los elevados impuestos, una moneda excesivamente apreciada y otros problemas estructurales frenaron la que fue una de las economías emergentes más dinámicas del mundo.
Rousseff anunció en los últimos meses recortes de impuestos para sectores estancados como la industria automotriz. Reducir los impuestos sobre la electricidad es parte de la estrategia de su gobierno para aliviar el elevado costo de hacer negocios en Brasil y estimular la economía.
La industria de electricidad en Brasil incluye empresas estatales como Eletrobras y multinacionales como AES Corp o GDF Suez. Tres cuartas partes de la oferta brasileña proviene de generación hidroeléctrica. El resto es nuclear, térmica y eólica.
Los precios de la electricidad son un importante componente del llamado "Costo Brasil", una mezcla de impuestos, elevadas tasas de interés, costos laborales, cuellos de botella de infraestructura y otros asuntos que han vuelto menos competitiva a la mayor economía de América Latina.