La asociación de exportadores espera una mayor producción en 2018, cuando es probable que el país sudamericano registre una cosecha récord, pero los volúmenes mensuales sólo se recuperarán cerca de junio, cuando los nuevos granos de café comiencen a llegar a los almacenes.
Sao Paulo. Brasil exportó un 10% menos de café en 2017 que en 2016 debido a que una cosecha menor y ventas más lentas de los agricultores redujeron los embarques a su volumen más bajo desde el 2012, aunque probablemente repuntará este año, dijo este martes la asociación local Cecafé.
La asociación de exportadores espera una mayor producción en 2018, cuando es probable que el país sudamericano registre una cosecha récord, pero los volúmenes mensuales sólo se recuperarán cerca de junio, cuando los nuevos granos de café comiencen a llegar a los almacenes.
El mayor productor mundial de café exportó 2,57 millones de sacos en diciembre, casi 400.000 sacos menos que en el mismo mes un año antes. Eso llevó el total de exportaciones en 2017 a 27,31 millones de sacos de 60 kilos de café verde, afirmó Cecafé.
Brasil tuvo una menor cosecha en 2017, de 44,97 millones de sacos según el Gobierno, debido al año de baja en el ciclo de producción bienal de café arábiga y un clima más seco a lo habitual. Los operadores del mercado prevén una cosecha récord de más de 53 millones de sacos este año.
Las exportaciones de arábiga en 2017 alcanzaron los 27,02 millones de sacos, un 9,3% menos que en 2016. Los envíos de café robusta alcanzaron los 292.256 sacos, un 49% menos que en el año previo y la menor cantidad desde 1990.
La producción de la variedad robusta, usada mayormente para elaborar café instantáneo, se recuperó tras dos años de sequía.
El jefe de Cecafé, Nelson Carvalhaes, dijo que Brasil tendrá muy bajas existencias al final de la cosecha actual en junio, menos de 8 millones de sacos, debido al menor cultivo y al alto consumo local, pero está optimista sobre la segunda mitad de 2018 y en el futuro