La propia Petrobras había dado la alarma este miércoles, reportando un problema cerca del gigante buque de producción P-57 en el campo Jubarte, dijo la agencia de protección ambiental de Brasil, Ibama.
Brasilia. La compañía petrolera estatal brasileña Petrobras, la Armada y reguladores de la industria investigaron este jueves múltiples reportes de una filtración de petróleo desde un campo en altamar, pero dijeron que no hallaron señales de crudo en el agua.
La propia Petrobras había dado la alarma este miércoles, reportando un problema cerca del gigante buque de producción P-57 en el campo Jubarte, dijo la agencia de protección ambiental de Brasil, Ibama.
La Armada dijo que recibió reportes del derrame el miércoles, y el diario Folha de Sao Paulo sostuvo que trabajadores petroleros reportaron una mancha de crudo de 1 kilómetro de largo cerca del P-57 cuando regresaban desde su turno en el mar.
Barcos y aeronaves fueron desplegados para investigar, pero no hallaron rastros del derrame.
"Después de las noticias de una supuesta mancha cerca del P-57, eso llevó esta tarde a una verificación en el lugar que confirmó la normalidad de las operaciones en la región", dijo Petrobras en la noche del jueves.
Agregó que "todos sus sistemas de control sobre las unidades de producción y perforación frente a la costa del estado de Espirito Santo están operando dentro de los parámetros de normalidad".
Un líder del sindicato que representa a los trabajadores de la P-57 dijo a Reuters que un pequeño derrame podría haberse dispersado antes de que se realizara una inspección formal.
"Es casi imposible imaginar que Petrobras habría informado a la Ibama de algo si al menos no hubiesen visto petróleo en el agua", dijo Valnisio Hoffman, jefe de administración del sindicato Sindipetro de Espirito Santo. "No reportas algo que no está allí", agregó.
Una portavoz de Petrobras rehusó confirmar o negar si Petrobras informó a la Ibama del derrame el miércoles.
Hoffman, quien ha trabajado en la P-57 y es un contacto regular con sus funcionarios principales, declaró que es poco probable que el derrame proviniera del enorme barco de producción, conocido como FPSO. Petróleo o fluido de perforación podría haberse filtrado desde plataformas de perforación cercanas o desde otra FPSO, afirmó.
Hay otros dos barcos de producción de Petrobras y una plataforma de perforación que Petrobras arrienda a la suiza Noble Corp. en un radio de seis a 10 kilómetros de la P-57.
Buques de carga y mantenimiento que funcionan con petróleo suelen acoplarse a las naves o pasar por el campo, a unos 85 kilómetros de la costa. Jubarte se encuentra en una de las zonas marítimas más concurridas de la costa de Brasil.
Jubarte produjo 196.000 barriles de petróleo y gas natural equivalente por día (boepd) en febrero, o cerca de un 8 por ciento de la producción total de Brasil de 2,63 millones de boepd, según el regulador local, la ANP.
Grandes desafíos. Petrobras planea invertir casi US$225.000 millones en cinco años para triplicar la producción a cerca de 6 millones de bpd al 2020. La mayor parte de ese petróleo provendrá de los yacimientos mar adentro que se sitúan cerca de los estados de Rio de Janeiro y Sao Paulo.
Sin embargo, derrames recientes han hecho que la atención se centre sobre los ambiciosos planes de Brasil y su capacidad para desarrollar sus gigantescos, pero técnicamente difíciles, yacimientos de aguas profundas.
Los hallazgos de petróleo en los últimos cinco años se encuentran entre los más grandes del mundo en las tres últimas décadas y podría permitir a Brasil superar a Estados Unidos como el tercer productor de petróleo del mundo. También se encuentran en algunas de las aguas más profundas consideradas para la explotación de crudo.
En noviembre, un derrame en el campo Frade, ubicado al sur de Jubarte, alentó demandas civiles en busca de una compensación millonaria por daños y cargos criminales contra Chevron, que opera el yacimiento; Transocean, su contratista que realiza las perforaciones; y 17 de los empleados de ambas compañías.
Chevron y sus socios en el yacimiento decidieron cerrar la producción en Frade después de que se detectaron nuevos derrames en marzo. Frade produjo 64.000 barriles de petróleo por día en febrero, dijo la ANP.
Chevron y Transocean niegan haber actuado mal.
Chevron posee un 52% de las acciones de Frade y Petrobras un 30%. Un grupo japonés liderado por Inpex y Sojitz Corp cuenta con el remanente.
Petrobras dijo el jueves que es poco probable que el campo Frade se cierre permanentemente, y que su reapertura probablemente ocurrirá después de que se resuelvan las causas del derrame de noviembre.
Las acciones preferenciales de Petrobras, el tipo de valor más transado de la compañía, cayeron un 4,46% a 18,43 reales en Sao Paulo, su nivel más bajo desde octubre. El índice Bovespa de la bolsa de Sao Paulo cayó un 3,31%.
