La multa se suma a los 50 millones de reales que la agencia de supervisión medioambiental, Ibama, aplicó a Chevron por causar el derrame en el campo Frade cuando las rocas del lecho marino cedieron debido a un aumento de presión.
Brasilia. La agencia de supervisión medioambiental de Brasil multó a Chevron Corp con 10 millones de reales (US$5,4 millones), por violar debido los términos de su licencia al contener un derrame de crudo desde un pozo en altamar que perforó en noviembre.
La multa se suma a los 50 millones de reales que la agencia de supervisión medioambiental, Ibama, aplicó a Chevron por causar el derrame en el campo Frade cuando las rocas del lecho marino cedieron debido a un aumento de presión. Chevron estima que 2.400 barriles de petróleo salieron al mar.
Las multas parecen insignificantes frente a la demanda por US$11.000 millones que los fiscales del estado de Río de Janeiro buscan presentar contra la compañía por un derrame que analistas consideran como menor y que nunca llegó a las costas del país.
Esa medida ha planteado preocupaciones de que una impredecible supervisión de los organismos reguladores pueda disuadir a las grandes firmas petroleras de invertir en Brasil, justo cuando el país busca explotar vastas nuevas reservas de crudo de hasta 50.000 millones de barriles descubiertas en el 2007.
Las llamadas reservas subsal de Brasil se encuentran a 7 kilómetros bajo la superficie del mar, lo que hace que su explotación sea un desafío técnico y, por lo tanto, acarrea potencialmente mayores riesgos de accidentes.
Ibama dijo que la multa más reciente se debió a que Chevron no se apegó al Plan Individual de Emergencias establecido en la licencia ambiental que necesita para operar. Ibama dijo que Chevron carecía del equipamiento necesario y que respondió de forma lenta al derrame.
La policía federal también ha recomendado que se acuse a varios ejecutivos de Chevron y del contratista de la plataforma Transocean por delitos ambientales y por retener información a los investigadores.
Transocean emitió un comunicado en la noche del viernes en el que detalla algunos de esos hechos y recuerda a los inversores que su contrato por la plataforma Sedco 706, que Chevron operaba en Brasil, exige que la compañía con sede en California indemnice a Transocean por los reclamos que se deriven de contaminación bajo la superficie del agua.