De acuerdo a un informe de la oficina gubernamental de estadísticas agrícolas Conab, el total de la producción de café en 2017 sería de 44,77 millones de sacos de 60 kilos, comparados con los 45,6 millones proyectados en mayo.
Sao Paulo. El Gobierno brasileño recortó este jueves sus pronósticos para la cosecha de café de este año en el mayor productor y exportador del grano del mundo, con una fuerte reducción en la variedad arábiga.
De acuerdo a un informe de la oficina gubernamental de estadísticas agrícolas Conab, el total de la producción de café en 2017 sería de 44,77 millones de sacos de 60 kilos, comparados con los 45,6 millones proyectados en mayo. El año pasado, la producción total fue de 51,37 millones de sacos.
Conab redujo su estimación de producción de café arábiga suave a 34,06 millones de sacos, desde una estimación de 35,4 millones de sacos en mayo.
Brasil ya esperaba obtener menos arábiga porque los campos están atravesando el año de menor producción del ciclo bienal de café. El país produjo 43,38 millones de sacos de arábiga en 2016.
El pronóstico de producción de la variedad robusta, ampliamente usada para la producción de café instantáneo, se mantuvo en 10,7 millones de sacos contra 10,1 millones proyectados en mayo, mostrando una fuerte recuperación respecto al 2016, cuando una sequía derivó en una cosecha de sólo 7,98 millones de sacos.
Los analistas de Conab no brindaron motivos para explicar la revisión de las proyecciones.
La agencia aún tiene que divulgar su estimación para la cosecha del próximo año, algo que planea hacer sólo en diciembre después de evaluar la floración, una fase clave para determinar el potencial desarrollo de las plantas de café.
Agricultores y cooperativas en Brasil han señalado que la perspectiva de una gran cosecha el próximo año -cuando el país esté en el año favorable del ciclo de arábiga- ha quedado opacada por una severa sequía que dejó muchos campos sin una gota de lluvia durante más de un mes.
Los actuales pronósticos meteorológicos anuncian el fin de la sequía, con unos 64 milímetros de lluvia esperados en la importante región productora de Minas Gerais hacia los primeros días de octubre. No está claro si las precipitaciones serán suficientes para revivir las plantaciones.
