Tras el acuerdo, Brasil logra proteger a su debilitado sector automotor, en tanto que el monto de las cuotas y otros detalles se darán a conocer este lunes en una conferencia de prensa.
Brasilia. Brasil ha negociado la renovación de su acuerdo de cuotas recíprocas de importación de automóviles con México, dijo este domingo el ministerio de Relaciones Exteriores del país sudamericano, un convenio que busca proteger a su debilitado sector automotor.
El acuerdo original de 2012 imponía aranceles de hasta un 35% a exportaciones por encima de un límite por año de unos US$1.500 millones, permitiendo el libre comercio de vehículos después de su vencimiento el 19 de marzo de este año.
Ahora los dos países acordaron renovar su acuerdo por cuatro años, dijo un portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, y agregó que el monto de las cuotas y otros detalles se darán a conocer en una conferencia de prensa con autoridades de los dos países el lunes.
Brasil, que enfrenta menguadas ventas de autos, urgió a México a extender el acuerdo para ayudar a su industria que ha despedido a miles de trabajadores en los meses recientes.
México, en tanto, buscaba un libre comercio para impulsar su floreciente industria automotriz.
Brasil considera que las exportaciones automotrices de México sin restricción son una amenaza para su industria automotriz local.
Un auto vendido en México puede costar la mitad de su precio en Brasil, donde los elevados impuestos, cuellos de botella y poderosos sindicatos han dañado la competitividad.
Brasil, golpeado por una decreciente demanda ante un debilitamiento de la economía, fue reemplazado por México el año pasado como el mayor fabricante de autos de América Latina.
Brasil registró su primer déficit comercial anual en 14 años en 2014. (Reporte de Alonso Soto, traducido por Verónica Gómez Sparrowe, editado por Patricia Avila)