China representa la mitad de la demanda global de cobre, estimada en entre 22 y 23 millones de toneladas este año.
El crecimiento de la demanda de cobre por parte de China se vería afectado en el 2016 por una nueva directriz de los reguladores que podría llevar a reemplazarlo por metales más baratos como el aluminio para la fabricación de cables, dijo el lunes Goldman Sachs.
China representa la mitad de la demanda global de cobre, estimada en entre 22 y 23 millones de toneladas este año.
Casi la mitad del crecimiento de la demanda china el próximo año podría verse afectada por los nuevos estándares, que regulan sobre el uso de cables de aluminio de baja tensión y que fueron introducidos por la Administración Nacional de Energía del país asiático, dijo el banco.
Los consumidores han usado cobre para fabricar cables de energía de baja tensión, que se usan mayormente para conectar edificios a subestaciones, dijo Goldman, y agregó que debido a los nuevos estándares ahora optarían por aleaciones de aluminio dado que el precio del cobre es 3,4 veces mayor que el del aluminio en China.
"Esta noticia suma un mayor riesgo a la baja de nuestro cálculo de un crecimiento de la demanda china (de cobre) de 4 por ciento en el 2016", agregó Goldman.