Según, datos de la Organización Internacional del Cacao (ICCO), entre 70% y 100% del total de la exportación de cacao de países como Bolivia, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Perú y México corresponde a estas variedades especiales de cacao.
Latinoamérica es la principal región productora de las variedades “prime” de cacao a nivel mundial, con cerca del 80% de la producción global, debido a su diversidad genética, destacó el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
Según, datos de la Organización Internacional del Cacao (ICCO), entre 70% y 100% del total de la exportación de cacao de países como Bolivia, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Perú y México corresponde a estas variedades especiales de cacao.
Sin embargo, existen importantes desafíos para consolidar una posición competitiva de la región en este promisor segmento del mercado.
Así lo revelaron Eleonora Silva Pardo, directora representante de CAF en Perú, y Jaime Salomón Salomón, viceministro de Desarrollo e Infraestructura Agraria y Riego, al lanzar el Observatorio de la Iniciativa Latinoamericana del Cacao (ILAC).
El lanzamiento se realizó en el marco del “Simposio Internacional sobre Investigación Cacaotera”, que se desarrolla del 13 al 17 de noviembre y reúne a más de 500 participantes, principalmente delegaciones que representarán a las potencias productoras de cacao en el mundo como Ghana, Brasil, Costa de Marfil, México, entre otros.
Silva Pardo recordó que CAF impulsó en el año 2016 la Iniciativa Latinoamericana del Cacao (ILAC), a fin de promover el desarrollo del cacao como actividad económica sostenible y elemento integrador de los pueblos que ancestralmente lo han utilizado en la región.
La iniciativa actualmente comprende a Perú, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, República Dominicana y Panamá.
Actividad familiar. Silva refirió que un 90% de producción del cacao se sustenta en actividades familiares de baja escala de menos de cinco hectáreas y en los referidos países se cultivan alrededor de 1.7 millones de hectáreas.
Asimismo, indicó que las exportaciones a mercados de Europa y Estados Unidos, principalmente, bordean las 745 toneladas métricas y equivalen a unos US$985 millones.
“El cultivo del cacao beneficia directamente a 329,607 productores, pero promueve indirectamente la inclusión económica y mejora en los estándares de vida de más de tres millones de latinoamericanos” subrayó Silva.
Asimismo, indicó que con el crecimiento de la demanda por el cacao prime latinoamericano, muy superior a la media del cacao standard que se comercializa en la forma de commodities, el desarrollo de cadenas de valor asociadas al cacao fino son un desafío y ofrece una oportunidad para los países productores de la región.
Mecanismos de mercadeo. Por su parte, Salomón sostuvo que el Ministerio de Agricultura (Minagri) como presidente del Foro de la Iniciativa Latinoamericana del Cacao para el período 2016-2018, junto al Programa de Biodiversidad de la Unidad de Negocios Verde de CAF, tuvieron la idea de impulsar el Observatorio de la ILAC, como un mecanismo de inteligencia de mercado, que ofrezca informaciones útiles para el desarrollo del mercado del cacao fino y de aroma.
“El Observatorio sistematizará informaciones macro y microeconómicas; así como datos estadísticos”, subrayó.
Además, indicó que analizará noticias relevantes que apoyen en la toma de decisiones de autoridades, instituciones, empresarios, asociaciones, gremios de productores, aliados y otros stakeholders con el objetivo de contribuir con la competitividad del sector cacao fino en nuestra región.
Asimismo, afirmó que el desafío desde la oferta es identificar, mantener y ampliar la base genética que representan la principal ventaja comparativa regional.
Mientras que desde la perspectiva de la demanda, existe la necesidad de armonizar los procesos de identificación, cata y clasificación del cacao, sobre la perspectiva de sabores y aroma.
Perú. En otro momento, al tiempo de referir que el Perú tiene seis grandes regiones cacaoteras que representan el 90% de la producción nacional, Salomón estimó que la producción nacional crecerá este año entre 9 y 10%.
También destacó que gran parte del cacao fino de aroma está concentrado en el territorio nacional con características propias que lo diferencia del resto del mundo y por el que se llega a pagar entre 2,000 dólares hasta 8,000 dólares la tonelada en mercados internacionales de Europa y Estados Unidos.
“Actualmente se trabaja en generar una mejor oferta para el cacao fino peruano, pero además en la búsqueda de mercados internacionales; para ello venimos realizando un trabajo coordinado entre el Ministerio de Agricultura y Riego, el Ministerio de Comercio Exterior y la Agencia de Promoción de las Exportaciones Promperú”, puntualizó.