Según el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, Luis Genaro Muñoz, “la tendencia del año cafetero es muy bueno. De hecho el año pasado íbamos en 2,2 millones de sacos en los cuatro primeros meses, hoy tenemos 3,8 millones de sacos”.
Bogotá. El gerente de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, Luis Genaro Muñoz, dijo que para este año espera un recuperación del sector, y que si el clima ayuda se podría pensar en una producción superior a los 9 millones de sacos de 60 kilos.
Pese a que admitió que para este año no se tiene un pronóstico, la producción de 2011 dependerá “fundamentalmente del clima”. Explicó que Colombia debe estar en 2014 en una estructura cafetera que le permita por lo menos estar produciendo 14 millones de sacos en condiciones normales de clima.
El gerente del gremio cafetero indicó que la tendencia del año cafetero que se inició en octubre, frente a un año atrás, “es muy bueno. De hecho el año (cafetero) pasado íbamos en 2,2 millones de sacos (de café de 60 kilos) en los cuatro primeros meses, hoy tenemos 3,8 millones de sacos”.
Muños destacó que la tendencia de la recuperación en Colombia de la producción cafetera va “por buena senda”.
Recordó que en enero de este año, frente al mismo mes de un año atrás, es de 76% más de producción. “Pasamos de 515.000 sacos a 908.000 sacos, eso marca una tendencia de recuperación en Colombia.
Advirtió que para continuar la recuperación de la producción cafetera se requiere combatir la Roya hasta erradicarla definitivamente del país, acelerar el proceso de renovación en variedades re existentes.
Insistió que si el clima le ayuda a los cafeteros es muy posible que la producción para 2011 esté por encima de los 9 millones de sacos. “Dios quera que el clima no se agrave tanto como los científicos estiman, para los primeros meses del año. Si hay comportamiento normal, sin duda alguna superaremos esa cifra, pero hay que esperar un poco el clima de los tres primeros meses”.
Reiteró que el reto del sector cafetero es combatir la Roya. “La Roya definitivamente tuvo una explosión de infectación como consecuencia del severo invierno”.