Organizaciones campesinas señalan que son alrededor de 300 las reivindicaciones que el sector le hará al gobierno.
Brasilia. Campesinos de Brasil iniciaron hoy lunes el 20 Grito de la Tierra, ceremonia que pretende movilizar a 100.000 trabajadores rurales de todo el país para pedir por una reforma agraria, el fortalecimiento de la agricultura familiar y políticas sociales para el sector.
La marcha es organizada por las 27 federaciones regionales de los Trabajadores de la Agricultura (Fetags) y por la Confederación Nacional de los Trabajadores en la Agricultura (Contag), cuyos líderes erán recibidos por representantes del gobierno.
En la agenda, que se extiende hasta el 19 de mayo, están programadas reuniones y audiencias en 19 ministerios y diversos órganos oficiales.
De acuerdo con Alberto Broch, presidente de la Contag, el de este año será el mayor Grito de la Tierra de la historia, con 300 reivindicaciones que serán presentadas al gobierno.
"Podemos adelantar que el peso de las movilizaciones en todo el país se dará, principalmente, alrededor de esos temas", señaló el dirigente, quien informó que el día 20, cuando se espera una respuesta de las autoridades, está prevista la mayor movilización.
Además de movilizar a los trabajadores a la capital Brasilia, una serie de actos descentralizados apunta a presionar a los gobiernos locales para que las políticas públicas lleguen hasta los más necesitados.
Entre las demandas están el asentamiento de 150.000 familias e inversiones por 51.400 millones de reales (US$23.000 millones) para el desarrollo sustentable de la agricultura familiar.