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Canadá: informe reconoce alta contaminación de la industria del petróleo
Domingo, Abril 20, 2014 - 17:31

Es el único país que se ha retirado del tratado de Kioto. Lo hizo para desarrollar la industria del petróleo, sin pagar multas. Sin embargo, un informe del propio ministerio del Medio Ambiente confirma que se trata del sector más contaminante de Canadá.

Ottawa. Tras el retiro de Canadá del Protocolo de Kioto en 2012, el sector petrolífero canadiense se ha convertido en la mayor fuente de gases invernadero del país.

Un informe oficial conocido en los últimos días y que abarca el periodo de entre 1990 y 2012 señala que las emisiones de gases con efecto invernadero del sector petrolífero y del gas en Canadá superaron por primera vez a las del sector del transporte en 2012.

El informe del ministerio de Medio Ambiente de Canadá señala que las emisiones del sector petrolífero y del gas sumaron 173 millones de toneladas de dióxido de carbono, equivalente un 25% del total de las emisiones del país.

Por su parte, el sector del transporte tuvo unas emisiones de 165 millones de toneladas de CO2 equivalente, un 24% del total del país.

El informe, que Canadá tiene que elaborar cada año como parte de sus obligaciones ante las Naciones Unidas, anticipa que las emisiones de dióxido de carbono del país seguirán aumentando en los próximos años y no podrá cumplir los limitados objetivos que el propio gobierno canadiense se ha impuesto.

Este aumento de las emisiones se produce paralelamente a la controvertida salida de Canadá del Protocolo de Kioto, el acuerdo multinacional negociado por los países industrializados para reducir sus emisiones.

En diciembre de 2011, el gobierno canadiense anunció de manera inesperada su retiro del Protocolo de Kioto, un acuerdo internacional que el país ayudó a negociar en la década de los años noventa, para poder desarrollar sin limitaciones sus reservas petrolíferas.

Y un año después, en diciembre de 2012, la retirada se hizo efectiva, convirtiendo a Canadá en el único país que ha abandonado Kioto tras su ratificación y la primera vez en la historia del país norteamericano que da la espalda a un convenio internacional.

Las autoridades canadienses también admitieron que la salida permitiría al país desarrollar sin límites las arenas bituminosas de la provincia de Alberta, consideradas entre las tres mayores reservas de petróleo del mundo, junto las de Arabia Saudí y Venezuela.

El primer ministro canadiense, que proviene de la lacita provincia, que además es la base de su Partido Conservador, ha declarado que el desarrollo de las arenas bituminosas es un "objetivo estratégico" del país, a pesar del negativo impacto medioambiental de su explotación masiva.

Desde 1990, la producción de las arenas bituminosas canadienses se ha quintuplicado, originando una explosión de emisiones del sector, especialmente porque el gobierno canadiense se ha negado hasta el momento a regular las emisiones del sector petrolífero como lo ha hecho con el sector del transporte.

Paradójicamente, la postura de Ottawa le puede costar cara. En Estados Unidos se genera un claro debate para bloquear la construcción de Keystone XL, un oleoducto considerado vital para el desarrollo de las arenas bituminosas.

La semana pasada, el ex presidente estadounidense Jimmy Carter, añadió su nombre a una carta dirigida a Barack Obama y firmada por varios premios Nobel, en la que solicitan al presidente estadounidense que rechace la construcción del citado oleoducto.

"El proyecto Keystone XL es el eje de la expansión de las arenas bituminosas y el subsiguiente aumento de la contaminación, originando más agitación climática con impactos que se sentirán en todo el mundo", plantean los premios Nobel en la misiva al mandatario estadounidense.

Autores

EFE