La cita es la primera entre las partes desde que el Grupo Unidos por el Canal notificó el pasado 30 de diciembre la suspensión de las obras a partir del próximo día 20 si la ACP no reconoce "sobrecostes", que cifró en más de US$1.600 millones y que no puede soportar.
Panamá. La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y el consorcio a cargo de la ampliación de la vía acuática iniciaron este martes una reunión en la que tratan de acordar un aporte de capital extraordinario que impida la paralización del proyecto en las próximas semanas.
Fuentes de la ACP confirmaron que representantes del Grupo Unidos por el Canal (GUPC) y la administración de la vía iniciaron pasadas las 10:00 hora local (15:00 GMT) el encuentro en el edificio sede de la Autoridad, en la capital panameña.
La cita es la primera entre las partes desde que el GUPC, que lidera la española Sacyr, notificó el pasado 30 de diciembre la suspensión de las obras a partir del próximo día 20 si la ACP no reconoce "sobrecostes", que cifró en más de US$1.600 millones y que no puede soportar.
El encuentro de este martes se acordó el lunes después de que la ministra de Fomento, Ana Pastor, sostuviera reuniones por separado con el GUPC, el presidente panameño, Ricardo Martinelli, y la ACP, a fin de lograr que las partes se sentaran a negociar una salida al conflicto contractual.
El administrador de la ACP, Jorge Quijano, dijo el lunes tras su entrevista con Pastor que la reunión de este martes con el consorcio era "para abordar algunos temas económicos que tienen que ver con el flujo de caja que ellos necesitan para poder seguir adelante con la obra".
"Estamos hablando de algunos fondos adicionales que ellos (el consorcio GUPC) tendrían que poner de su parte y nosotros igualmente pondríamos un adicional" para evitar "el paro de las obras", declaró Quijano.
El aporte extraordinario le daría solvencia al consorcio durante los "próximos dos o tres meses", que es el tiempo que se tomará la Junta de Resolución de Conflictos (DAB, por sus siglas en inglés) en resolver un reclamo por "US$585 millones" presentado por el GUPC en 2012, explicó el alto funcionario.
La DAB es la segunda instancia de reclamos prevista en el contrato. La primera es la ACP, y la tercera un arbitraje internacional en Miami, Estados Unidos, recordó el alto funcionario panameño.
Quijano reconoció el lunes que este primer acercamiento de hoy "no significa" que ya no exista "la intención de suspensión" de las obras a partir del próximo día 20, porque el reclamo de más de US$1.600 millones "tiene que fluir a través del proceso" previsto en el contrato, y el consorcio "tendrán que sustentarlo".
Pastor, quien continúa en Panamá aunque no participa en el encuentro entre la ACP y el GUPC, se declaró el lunes "satisfecha" por la "buena disposición" de las partes para dialogar a partir de este martes y tratar de evitar la paralización de las obras de ampliación.
"El primer acuerdo, y es importante este avance, es que GUPC acepta presentar sus reclamos por los canales que establece el contrato", una de las exigencias de la ACP, resaltó ayer la ministra española en rueda de prensa en la sede de la Embajada de España.
El anuncio del inicio de las negociaciones en Panamá impulsaron ayer las acciones de Sacyr en la Bolsa de Madrid en 6,01%, tendencia que se mantuvo en la apertura de la jornada bursátil de este martes, cuando subían un 4,75%.
El pasado 2 de enero, tras hacerse pública la intención de Sacyr de suspender las obras, sus acciones cayeron 8,95%, al día siguiente el retroceso fue del 6,86%.
Sacyr y la italiana Impregilo tiene una participación del 48 % en el GUPC, que además integran la belga Jan de Nul y la panameña CUSA.
El consorcio obtuvo en 2009 el contrato por US$3.118 millones para la construcción del tercer juego de esclusas del Canal de Panamá, cuyo proyecto de ampliación tiene un costo global de US$5.250 millones.