InterCement, que tiene 40 plantas en ocho países, planea incluir en la operación a su filial portuguesa Cimpor Cimentos de Portugal SA y fábricas en Cabo Verde, Mozambique y Sudáfrica.
Sao Paulo. La empresa brasileña InterCement Participações SA, uno de los mayores fabricantes de cemento de Latinoamérica, está considerando sacar a bolsa sus operaciones europeas y africanas para recaudar efectivo y reducir aún más su deuda, dijeron a Reuters dos personas con conocimiento del tema.
InterCement, que tiene 40 plantas en ocho países, planea incluir en la operación a su filial portuguesa Cimpor Cimentos de Portugal SA y fábricas en Cabo Verde, Mozambique y Sudáfrica, agregaron las fuentes.
La salida a bolsa ha sido discutida con algunos bancos de inversión, pero InterCement aún no ha contratado asesores financieros, agregaron las fuentes, que pidieron anonimato porque las conversaciones son privadas.
Otras alternativas, como un intercambio de activos o la venta de una participación, han sido previamente consideradas por el accionista controlador de la empresa, el conglomerado de construcción Camargo Correa SA, agregaron las fuentes.
Si InterCement continúa con los planes, la unidad podría iniciar sus operaciones bursátiles en la segunda mitad del año, dijo una de las fuentes. Aún no se ha elegido un lugar, pero Londres o Fráncfort son los más probables, agregó la fuente.
InterCement se negó a comentar lo que calificó como "rumores del mercado".
Camargo Correa SA está considerando la medida luego de la exitosa Oferta Pública Inicial (OPI) en noviembre de la unidad argentina de InterCement, Loma Negra Cia Industrial Argentina SA, que cotiza en Buenos Aires y Nueva York con una capitalización bursátil de US$2.900 millones.
La OPI de Loma Negra recaudó US$954 millones y ayudó a reducir la deuda de InterCement.
Una posible segunda salida a bolsa dentro del grupo refleja su nueva estrategia para lidiar con los efectos de la recesión más dura en Brasil en décadas, la que se suma a años de fuertes préstamos y a una investigación de corrupción que involucró a la unidad de ingeniería del grupo.
Desde que firmó un acuerdo de indulgencia en 2015 con fiscales brasileños que investigan el caso de corrupción, el conglomerado ha recaudado cerca de US$3.500 millones por la venta de activos importantes, entre ellos participaciones controladoras en la empresa de calzado Alpargatas SA y el conglomerado CPFL Energia SA