La firma prevé invertir dicho monto en los próximos 28 meses para la modernización de dos de sus plantas cementeras ubicadas en Oaxaca e Hidalgo, informó Guillermo Álvarez Cuevas, director general de esta cooperativa.
Ixtapa Zihuatanejo, Gro. La cementera Cruz Azul prevé invertir en los próximos 28 meses alrededor de US$300 millones para la modernización de dos de sus plantas cementeras ubicadas en Oaxaca e Hidalgo, informó Guillermo Álvarez Cuevas, director general de esta cooperativa.
Entrevistado en el marco de su participación en la XX Conferencia Regional Cooperativas de las Américas, Álvarez Cuevas comentó que lo que se busca con dicha inversión es eficientar sus procesos en estas dos plantas con la finalidad de ser más competitivos en el mercado, en caso de que exista un repunte de la economía nacional.
“Queremos modernizar las plantas de Hidalgo y Oaxaca. Una cosa es tener la capacidad instalada, pero podemos mejorarla en cuanto a volumen. Nos interesan unidades de más bajo costo de producción, de ahorro de energía, de consumo energético y que esto pueda llevarnos a ser más competitivos y a las unidades de más antigüedad, que no estén rezagadas tecnológicamente, darles un mantenimiento correctivo y que estén listas en algún repunte de la economía”, detalló el directivo.
Álvarez Cuevas precisó que dicha inversión no se realizará de forma simultánea y se prevé que el proceso se concrete en un plazo de 28 meses: “No será en forma simultánea, sino será con un ligero desfase de tal manera que desde la terminación de una y el arranque de otra, pasaran de seis a ocho meses. Un proyecto que pudiera durar hasta 42 meses lo vamos hacer en 28”.
Apoyo a la reconstrucción. El directivo de la cooperativa Cruz Azul precisó que ante los desastres naturales suscitados en septiembre pasado, la cementera busca reducir precios de sus productos en las zonas afectadas, con la finalidad de apoyar a las personas de dichas regiones, principalmente de Oaxaca.
“El esfuerzo que hizo la cooperativa fue en el sentido de que en los puntos de venta de esa zona de Oaxaca, donde se consideran alrededor de 157 comunidades, siendo Juchitán la cabecera distrital, se tuviera, prácticamente un precio del material incluyendo el IVA, transporte, puesto en el negocio del distribuidor, entre 25 y 30% abajo del mercado”, comentó.
Respecto al tema de las Zonas Económicas Especiales, Álvarez Cuevas indicó que si bien el objetivo de estos esquemas es reactivar la economía de las regiones elegidas, sería un aliciente para la inversión que también se den facilidades a las empresas ya establecidas en estas áreas. “Yo creo que lo más motivante sería que a empresas ya establecidas en estas zonas, si hay nuevas inversiones, también existan incentivos fiscales para ellas”, expresó.