Medios locales habían informado sobre la posibilidad de que la petrolera dejara sus actividades en Argentina, cuya filial en ese país apeló en diciembre un embargo de activos por hasta US$19.552 millones dictado por un juez de Buenos Aires.
Buenos Aires, EFE. La petrolera estadounidense Chevron ratificó este martes que mantendrá sus negocios en Argentina pese al embargo dictado por la Justicia de este país en el marco de una demanda por daños ambientales en Ecuador.
"Actualmente, y como resultado de una sentencia fraudulenta dictada en Ecuador, recae sobre Chevron Argentina el embargo de parte de sus activos e ingresos en el país. A pesar del impacto negativo que este hecho genera sobre la operación, Chevron Argentina ha ratificado su voluntad de seguir operando en el país", dijo la petrolera en un comunicado.
Medios locales habían informado días atrás sobre la posibilidad de que la petrolera dejara sus actividades en Argentina.
La compañía afirmó que continúa "trabajando en el desarrollo de sus planes a largo plazo de exploración, desarrollo y producción de hidrocarburos" en las provincias argentinas de Neuquén (suroeste) y Río Negro (sur).
Chevron, que ha suscrito un memorando con la petrolera argentina YPF con vistas al desarrollo del yacimiento de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, dijo que aspira a contribuir así con "Argentina en la senda de la recuperación del autoabastecimiento" energético.
La compañía, el cuarto mayor productor de petróleo de Argentina, afirmó que "continúa defendiéndose del embargo y confía en que finalmente la Justicia dirimirá la cuestión de manera favorable".
Chevron Argentina apeló en diciembre pasado el embargo de activos por hasta US$19.552 millones dictado en noviembre por el juez Adrián Elcuj Miranda, del fuero Civil de Buenos Aires.
El embargo de activos de Chevron en Argentina fue solicitado por abogados que representan a un grupo de indígenas y colonos de la Amazonía, que demandaron a la petrolera estadounidense en Ecuador por presuntos daños ambientales.
Los querellantes pretenden así asegurarse el cobro de los algo más de US$19.000 millones, incluidos honorarios legales, que dos tribunales de Ecuador han ordenado pagar a Chevron, dado que en el país andino la multinacional apenas tiene activos.
La causa en Ecuador es por el daño supuestamente ocasionado al medio ambiente de la Amazonía entre 1964 y 1990 por Texaco, compañía que fue adquirida posteriormente por Chevron.