El ministro de Hacienda chileno dijo que, además, le preocupaba el impacto de una caída en el precio del cobre, la principal exportación de Chile, sobre los pronósticos de crecimiento del país sudamericano.

Washington. El ministro de Hacienda de Chile dio un consejo a los exportadores de cobre preocupados por la reciente caída en el precio del metal: es momento de buscar protección monetaria.

Felipe Larraín dijo que además le preocupaba el impacto de una caída en el precio del cobre, la principal exportación de Chile, sobre los pronósticos de crecimiento del país sudamericano.

El ministro chileno recomendó a los exportadores que tomaran la oportunidad para controlar el riesgo monetario en el mercado de derivados.

"Los exportadores se quejan cuando el tipo de cambio está en 460 (pesos chilenos por dólar) o incluso bajo 460", dijo Larraín en Washington, donde participó en reuniones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial.

"Ahora que el tipo de cambio es más cercano a los 520 (pesos) podría ser tiempo de conseguir una buena cobertura", aseveró, en declaraciones traducidas del inglés.

El peso chileno cerró a 516,00 por dólar el viernes, un día después de terminar una jornada en su nivel más bajo desde julio del 2010.

Larraín dijo que tal debilidad es principalmente resultado de la baja en los precios del cobre. El metal sufrió su peor desempeño semanal en tres años en la última semana, en medio de los temores de los inversores por otra recesión global.

Larraín comparte la misma preocupación, pero dijo que, aunque no son ideales, las previsiones económicas del FMI para el 2012 son algo "con lo que Chile puede vivir".

En su última revisión, el FMI recortó sus previsiones de crecimiento para el 2012 para Estados Unidos y para la zona euro a 1,8% y 1,1%, respectivamente.

"Las cosas pueden empeorar desde allí", dijo, ante los temores de que una doble recesión en el mundo desarrollado impacte fuertemente a los mercados de países emergentes como Chile.

De ser ese el caso, Chile usaría un plan de contingencia para proteger su economía, expresó Larraín.

"Tenemos modos de maniobrar, tanto en política monetaria como fiscal. Tenemos una tasa de política monetaria de 5,25% ahora mismo. Tenemos un margen amplio para reaccionar", declaró.