Al nivel que se encuentra la producción actual podría superar la demanda en 57 mil toneladas el 2019, estimó la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco). Este ciclo alcista ha sido “un detonante para la construcción de nuevos proyectos”.

Santiago. El concepto de electromovilidad se hace cada día más común entre las personas, fenómeno que se incrementa aún más en la industria minera, que verá como la demanda en el mercado del litio crecerá en los próximos años.

La fiebre ha sido tal que ha generado la sostenida alza del litio a nivel externo, producto de los efectos que trae consigo la electromovilidad, cuestión que ha provocado que se pongan en marcha evaluaciones de toda clase de proyectos a nivel mundial, pero que podría transformarse en un efecto búmeran para toda la industria.

Según la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) esto va a significar “un obstáculo para nuevas iniciativas, por lo que sólo los proyectos apoyados por productores actuales con menores costos, financiamiento, tecnologías probadas o una mayor rentabilidad serán ejecutados”.

Un escenario que a partir del próximo año podría palparse en esta industria, como ya lo anticipó Morgan Stanley, que el mes pasado proyecto una caída de 45% en el precio del mineral al 2021 debido a una eventual sobreoferta, proyección que ahora es ratificada en parte Cochilco.

En su informe, Cochilco sostiene que el ciclo alcista de precios en torno al litio, ha sido “un detonante importante para la construcción de nuevos proyectos”.

“Sin embargo, desde el 2018-2019 en adelante existiría una tendencia a un superávit de litio en el mercado, que al 2019  alcanzaría las 56.771 toneladas de Carbonato de Litio Equivalente”, dijo Cochilco.

Como ejemplo, desde Cochilco proyectan que la oferta de litio sea de 440.300 toneladas y la demanda solo llegue a 372.200 toneladas.