Entre enero y marzo pasado la venta al por menor de alimentos en tiendas especializadas subió 30,1% respecto al mismo período 2011, cifra que es prácticamente la mitad del alza de 60% reportada entre enero y marzo del año pasado respecto al mismo lapso 2010.
Mientras que los porcentajes de venta en volumen y valor de alimentos caen a nivel del consumidor, los comerciantes han incrementado sus inventarios.
En tanto, el comercio al mayor de alimentos se incrementó en el primer trimestre del año respecto al mismo período de 2011, las ventas al por menor evidencian una desaceleración cuando se comparan ambos períodos, de acuerdo a las cifras del Banco Central de Venezuela (BCV).
Una revisión a las estadísticas del comercio permite comprobar que entre enero y marzo pasado, la venta al por menor de alimentos en tiendas especializadas subió 30,1% respecto al mismo período 2011, cifra que es prácticamente la mitad del alza de 60% reportada entre enero y marzo del año pasado respecto al mismo lapso 2010.
Al compararse el valor de las ventas de alimentos en locales especializados, se tiene que la variación porcentual fue de 51,6% entre enero y marzo 2012 frente al mismo lapso 2011, bastante menor al 76,5% reportado en el primer trimestre de 2011 con respecto a igual período 2010.
"Esa reducción de las cifras no significa necesariamente que haya caído el consumo de alimentos, pero sí que viene creciendo a una tasa menor", afirmó el economista Ángel Alayón.
Según su apreciación, este comportamiento pudiera estar relacionado con un consumo más racional y ponderado, alejado de los episodios de compras compulsivas observados en el primer cuarto de 2011 debido a la reducción de la variedad de víveres ofertados en ese entonces.
Al observar las estadísticas del BCV, se aprecia que entre enero y abril de 2011 el índice de diversidad mostró las cifras más bajas de todo el año, lo que a decir de los analistas repercutió en potenciar las compras más allá de las necesidades reales del consumidor.
En otras palabras, la caída de la diversidad impulsó las compras, razón por la cual se observa un alza en el volumen de ventas.
"Es posible que la gente esté comprando menos alimentos por la mera caída de su poder adquisitivo dada la alta inflación", afirmó un empresario del sector que prefirió el anonimato.
Su tesis podría sustentarse en otro dato que habla de la caída de las ventas de alimentos al menos en tiendas especializadas: el fuerte descenso del volumen del comercio al detal en enero 2012.
Aunque es común que en el primer mes del año haya poco volumen de ventas, en enero pasado la variación porcentual respecto a diciembre previo fue de 21,24%; cifra muy por encima de la registrada en enero de 2011, cuando el indicador cayó solo 13,6%.
"Eso no sólo habla de desaceleración sino de caída real", comentó el empresario, para quien la promulgación de la Ley de Costos y Precios Justos no ha tenido una repercusión significativa en el control de la inflación.
Inventarios en alza. Contrariamente a lo que sucede con las ventas al detal de alimentos, el comercio al mayor muestra cifras en ascenso, lo que para algunos analistas representa que los comerciantes están acumulando inventarios, en buena medida para abastecer anaqueles.
Según el BCV, al cierre del primer trimestre del año el volumen de ventas al mayor de alimentos, bebidas y tabaco tuvo un incremento porcentual de 10,37% respecto al mismo período de 2011, más del triple del porcentaje reportado entre enero y marzo de 2011 (3,17%) en contraste con el mismo período de 2010.
"Hay aumento de inventarios porque el comercio perdió el miedo a las inspecciones y está recuperando su capacidad de almacenamiento", afirmó el presidente de la firma encuestadora Datanálisis, Luis Vicente León.
Su apreciación se relaciona con los temores que despertó la promulgación de la Ley de Costos y Precios Justos, cuyo texto hacía presumir que el gobierno arreciaría los controles de inventarios para evitar acaparamiento.
"Superado el temor, los comercios, que antes estaban trabajando just in time, comienzan a comprar más al mayor para tener inventario", reiteró León, quien descartó que el mayor volumen de ventas esté relacionado con una reducción de las compras al detal.
Otro factor que ha repercutido en el alza del comercio al mayor, tanto general como de alimentos, guarda relación con la relativa estabilidad que durante el primer trimestre tuvieron los precios de los insumos, en contraste con el alza que tuvieron a principios de 2011 tras la devaluación implícita del bolívar, lo que automáticamente arrojó un alza de 65% de los víveres consumidos, buena parte importados.
Ello explicó que en el primer trimestre del año el valor de las ventas de alimentos al mayor subió 23,7% respecto al mismo lapso 2011.