Los puertos de la costa oeste, que manejan cerca de la mitad del comercio marítimo estadounidense y más del 70% de las importaciones de Asia, han sufrido graves retrasos desde octubre y sus consecuencias se están sintiendo más allá de Estados Unidos.
San Francisco/Tokio. Un conflicto laboral en los puertos de la costa oeste de Estados Unidos está interrumpiendo la cadena de abastecimiento en las rutas del Pacífico, obligando a algunos proveedores asiáticos a usar el más costoso transporte aéreo y encareciendo el costo del flete mientras crece la fila de cargueros que espera atracar.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, decidió enviar al secretario del Trabajo Tom Perez para lograr un acuerdo contractual entre trabajadores portuarios y el grupo que representa a navieras y operadores de las terminales, mientras los barcos se amontonan en los puertos y el retraso de cargas comienza a sentirse en la economía.
Un portavoz de Pérez dijo el lunes que el secretario de Transporte viajará el martes a San Francisco para reunirse con las partes en conflicto.
Los puertos de la costa oeste, que manejan cerca de la mitad del comercio marítimo estadounidense y más del 70% de las importaciones de Asia, han sufrido graves retrasos desde octubre y sus consecuencias se están sintiendo más allá de Estados Unidos.
La automotriz japonesa Honda Motor Co dijo el domingo que reduciría su producción en plantas en Ohio, Indiana y Ontario (Canadá), debido a que autopartes provenientes de Asia no pudieron llegar a destino por la disputa.
"No tenemos suficiente suministro de partes claves para mantener las líneas de producción funcionando tranquila y eficientemente", dijo el portavoz Mark Morrison.
Honda y otros fabricantes de automóviles comenzaron a transportar partes clave desde Asia a sus fábricas en aviones.
Con decenas de barcos atrapados en filas kilométricas en la costa oeste, algunos esperando por más de una semana, los precios de llevar la carga en contenedores ha comenzado a subir.
"La huelga está afectando a un montón de barcos. Hay muchos retrasos y eso está haciendo subir las tasas de (los contenedores) Panamax, ya que hay menos naves disponibles para nuevos pedidos", dijo un corredor líder en Singapur.
Un índice de precios de transporte en Shanghái para la costa oeste de Estados Unidos subió la semana pasada 23 puntos a 2.265 puntos y corredores dicen que ha aumentado otros cinco puntos el lunes.
Roberto Giannetta, secretario de la Asociación de Navieras de Hong Kong, dijo que los efectos se están sintiendo en todo el sector, porque las navieras están buscando maneras de evitar los retrasos.
"Todas las líneas navieras están siendo afectadas y todas están haciendo arreglos alternativos, de una manera u otra, para (...) reubicar activos en transpacífico o redirigir la carga a través de la costa este", agregó.
Incluso si el conflicto se resuelve, podrían haber consecuencias de largo plazo para los puertos y comunidades que dependen de ellos.
"La confianza en los puertos de la costa oeste está en mínimos históricos y la percepción de riesgo en la cadena de suministros en un máximo histórico", dijo Peter Tirschwell, jefe de análisis marítimo de JOC Group, un proveedor de cifras de comercio portuario en Estados Unidos.
Para las transportadoras aéreas, sin embargo, la crisis es una oportunidad.
Cathay Pacific reportó el lunes que las cifras combinadas de tráfico de carga y correo para Cathay Pacific y Dragonair crecieron 12,5% en enero, superando con creces el incremento del 2,7% en pasajeros, gracias a la expansión del tráfico a América del Norte.