Según el director ejecutivo del Mercado Ganadero de Rosario, dicho incremento se podría deber a un aumento del ingreso de la población, una baja del precio de la carne en el mostrador o un aumento del precio de los sustitutos.
El director ejecutivo del Mercado Ganadero de Rosario (Rosgan), Raúl Milano, afirmó que en el primer trimestre se observó "un consumo mayor de carne vacuna per cápita", de aproximadamente 57 kilos, y dio por superado el piso registrado en 2011 cuando se consumían entre 52 y 53 kilos por habitante en meses puntuales.
"Un incremento del 10% en el consumo de carne roja en la dieta de los argentinos puede tener distintos componentes, por ejemplo, un aumento del ingreso de la población, una baja del precio de la carne en el mostrador o un aumento del precio de los sustitutos", explicó el experto.
Destacó en ese sentido el impacto de este último factor, ya que el incremento de precios del pollo al consumidor fue de aproximadamente 40% en el último semestre.
Como consecuencia, evaluó Milano, durante los dos primeros meses de 2012 el consumo de carne aviar dejó de crecer, y se ubicó en promedio en 38 kilos per cápita.
El titular del Rosgan descartó la influencia de mayores ingresos de la población, ya que en el primer trimestre impactaron variaciones en tarifas, cargas impositivas, obras sociales y educación, mientras aún no cierran las negociaciones paritarias.
Milano considera más factible, como sustento del mayor consumo de carne, la ampliación de la oferta vacuna.
"Durante los meses de enero y febrero la importante sequía adelantó tropas terminadas para alivianar pasturas", explicó, mientras en marzo los productores habrían aumentado envíos de animales a faena para compensar la baja de rindes agrícolas.
Según el analista, "esto trajo nuevos volúmenes al Mercado de Liniers, y permitió el incremento consecuente de la faena y kilos de carnes producidos".
Milano, con todo, señaló que el mayor consumo de carnes rojas se vincula al encarecimiento del principal sustituto, el pollo, cuyo consumo llegó hacia fines de 2011 a 40 kilos per cápita por año.
También ayudó a la industria avícola el proceso de compensaciones, que ayudó a "consolidar un sector altamente competitivo internacionalmente", concluyó el titular del Rosgan