Según Correa, Chevron "contrataba peritos para que vayan a hacer inspecciones en los diferentes pozos" con la intención de indicar después a los peritos del tribunal lugares que no resultaron contaminados, pero sus propios expertos le informaron que sí había daños ambientales.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, dijo en la noche del martes que informes obtenidos por el Estado revelan que peritos contratados por la multinacional estadounidense Chevron constataron los daños ambientales causados por la compañía en la Amazonía ecuatoriana.
En un encuentro con medios de comunicación en Guayaquil (suroeste), el gobernante dijo que la multinacional, condenada por la justicia ecuatoriana a pagar US$9.500 millones de indemnización por los daños, llevó a cabo "preinspecciones" antes del juicio por los daños.
Según Correa, Chevron "contrataba peritos para que vayan a hacer inspecciones en los diferentes pozos" con la intención de indicar después a los peritos del tribunal lugares que no resultaron contaminados, pero sus propios expertos le informaron que sí había daños ambientales.
En opinión del jefe de Estado, la obtención de esos documentos, que hasta hace poco tiempo eran reservados, demuestra que los responsables de la petrolera son "unos sinvergüenzas", ya que "sabían que habían contaminado, pero con sus millones quieren quedar en impunidad" y ocultar los daños.
Colonos e indígenas ecuatorianos mantienen un litigio con la petrolera por los daños ambientales causados en la Amazonía ecuatoriana durante el tiempo en que operó en esa zona, entre 1964 y 1992.
Chevron, que reniega de las acusaciones y de la sentencia en su contra emitida por la justicia ecuatoriana en 2011, asegura que fue sometida a una trama de fraude en las cortes del país andino.
Además, la petrolera estadounidense ha acusado a los abogados que patrocinan a los ecuatorianos de haber armado un complot para perjudicarla.