Isaac se desplazó por la costa norte de las provincias del este de la isla el sábado, donde se ubica alrededor del 90% de la cosecha del grano, sacudiendo las plantas y dejando lluvias torrenciales antes de partir hacia EE.UU.
La Habana. La cosecha de café cubano comenzó antes de lo previsto esta semana, ya que los campesinos debieron intensificar la recogida de granos maduros debido al paso de la tormenta tropical Isaac el fin de semana.
Isaac se desplazó por la costa norte de las provincias del este de la isla el sábado, donde se ubica alrededor del 90% de la cosecha de café, sacudiendo las plantas y dejando lluvias torrenciales antes de partir hacia Estados Unidos.
"Bajo los vientos de Isaac, recogimos los granos maduros para evitar que se perdieran, ahora hay que acelerar la cosecha, porque las maduraciones van a ser grandes. Mis cafetales están bien paridos este año y voy a garantizar que se pueda recoger todo", dijo por teléfono la agricultora Adela Martínez, en la provincia oriental de Santiago de Cuba.
Fuentes de otras provincias productoras como Guantánamo y Granma dijeron que Isaac contribuyó a la maduración antes de lo esperado, pero no produjo otros efectos.
Aún se cuantifican las pérdidas sufridas en el municipio cafetalero de Maisí, en la provincia oriental de Guantánamo, donde los residentes recolectaron los granos caídos.
Cuba produjo 7.100 toneladas de granos semiprocesados durante la cosecha 2011-2012 y tiene planes de aumentar la producción en la actual temporada a 8.500 toneladas, según el Ministerio de Agricultura.
La cosecha de café comienza generalmente en septiembre, aunque la mayor parte de los granos se recoge entre octubre y enero.
La pasada temporada fue el mejor en más de una década, lo que podría vincularse a una serie de reformas económicas dirigidas a reducir las importaciones.
Unos 35.000 productores, a cambio de créditos de bajo interés del gobierno e insumos subsidiados, deben vender todo el café al Estado a precios que históricamente han sido inferiores a los que pagan en el mercado negro.
Analistas locales dijeron que entre el 10% y 20% de la cosecha fue desviada, a pesar de los recientes aumentos en los precios que paga el Estado para contrarrestar el mercado negro.
Las plantaciones del país, que en tiempos de la revolución de 1959 produjo 60.000 toneladas de café, han disminuido constantemente desde entonces.
El Estado ha arrendado cafetales abandonados a cientos de personas, como parte de las reformas iniciadas por el presidente Raúl Castro en los últimos años.
Cuba importó 18.000 toneladas de granos semiprocesados desde Vietnam en el 2010, a un costo de US$38 millones, y un poco menos en el 2011, aunque no hay cifras disponibles.
El gobierno planea producir 22.000 toneladas para el 2015 y, finalmente, entre 28.000 y 30.000 toneladas al año, equivalentes a los niveles alcanzados en la década de 1970.