Los agricultores ha comenzado a exigir un precio de sustentación mayor a los US$5,50 que ahora rige.
Los aumentos en los costos de los pesticidas, fertilizantes y la mano de obra han llevado a los productores bananeros a ajustar sus cuentas e incluso a hacer préstamos, pues sus gastos exceden a sus ganancias. De allí que una parte de los agricultores ha comenzado a exigir un precio de sustentación mayor a los US$5,50 que ahora rige.
Corazón Pérez, propietario de la hacienda del mismo nombre, explicó que hace dos meses su plantación fue cerrada y no podía producir porque estaba infectada con sigatoka negra. Para rehabilitarla, tuvo que hacer un préstamo de US$1.400 a la exportadora a la que vende la fruta y endeudarse con “prestamistas” por otros US$800.
Con ese dinero logró reactivar la plantación de tres hectáreas y comprar los insumos. El costo de esos productos, según Pérez, ha subido en el último año.
Los exportadores, en cambio, estiman que no es conveniente subir el precio por las condiciones del mercado internacional, que prevé excedentes de la fruta para el 2013. Además, advierten que la caja sería menos competitiva por los mayores costos que representa el transporte de la fruta y los beneficios arancelarios que tienen países como Colombia por acuerdos con la Unión Europea.
Eduardo Ledesma, presidente de la Asociación de Exportadores de Banano, señaló que si las condiciones del mercado mejoran, los exportadores podrían transferir parte de esos beneficios a los productores.
El ministro de Agricultura, Javier Ponce, no quiso adelantar una postura sobre el precio, pues aseguró que la próxima semana convocará a productores y exportadores para iniciar las negociaciones. “El primer paso allí es avanzar en esa negociación directa, en caso de que no se diera un acuerdo entre productores y exportadores nosotros entraríamos a establecer un precio de sustentación”, anotó.
El funcionario adelantó que el Ministerio realiza una evaluación sobre los costos de producción, que, junto con otros aspectos del mercado, servirán para hacer una propuesta una vez que se hayan agotado los diálogos en el sector.
Mientras la discusión por el precio se reactiva, el Ministerio ha iniciado procesos para controlar las plantaciones que podrían estar al margen de la ley y que tendrían un efecto en la sobreproducción. Dentro de esos controles, el Ministerio ordenó la inspección de 12 predios bananeros asentados en la provincia de Santa Elena para determinar si cuentan con los permisos respectivos. Se estima que más de 500 hectáreas bananeras se cultivan en ese sector.
Carlos Vélez, coordinador zonal 5 del Ministerio, señaló que se llamará a audiencia a los propietarios de esos sembríos para que justifiquen si los cultivos cuentan con autorizaciones.
El funcionario reconoció que las áreas sembradas al margen de la ley pueden afectar los precios de la fruta.
A más de las inspecciones, esa entidad ha procedido a sancionar a una empresa de El Oro por sembrar 1,5 hectáreas sin autorización y abrió un expediente administrativo a la compañía de Los Ríos por detectarse que ha sembrado un excedente de 46,17 ha. Las sanciones por ha bordean los US$600.
Por ahora, el gobierno no cuenta con datos específicos sobre las hectáreas que estarían operando fuera de la ley, pues recién en enero se tendrán los resultados de un catastro.
En tanto, Ponce sostuvo que junto a la Corporación Financiera Nacional (CFN) se analiza la creación de una línea crediticia emergente por el tema de la sigatoka negra.