Desde diciembre, el Gobierno del presidente Ollanta Humala no ha liderado ningún operativo policial de interdicción para desmantelar las minas ilegales en Madre de Dios, cerca de la frontera con Brasil y Bolivia, mostraron datos oficiales.
Lima. La producción ilegal de oro en Perú ha remontado este año, luego de que el Gobierno relajó las duras medidas que había aplicado para combatir esta actividad en una región amazónica, creando un escenario para una posible recuperación de su clave exportación minera.
Desde diciembre, el Gobierno del presidente Ollanta Humala no ha liderado ningún operativo policial de interdicción para desmantelar las minas ilegales en Madre de Dios, cerca de la frontera con Brasil y Bolivia, mostraron datos oficiales.
En el 2014, al menos 15 operaciones de este tipo fueron ejecutadas en la región, destruyendo con explosivos maquinarias usadas en la minería ilegal en campos improvisados en bosques a orillas de ríos, una actividad que ha generado gran contaminación.
Estas operaciones se detuvieron en medio de cambios de funcionarios y porque efectivos de la policía fueron trasladados a contener las protestas contra el proyecto de cobre Tía María de Southern Copper, dijo a Reuters el nuevo alto comisionado para reducir la minería informal, Antonio Fernández.
"Para hacer interdicciones en la zona Madre de Dios, se requiere mas de 1.000 efectivos policiales (...) para Tía María han desplazado mas de 5.000 efectivos, dijo Fernández.
Desde que se relajó la vigilancia policial, la producción de oro ilegal en Madre de Dios ha remontado, aumentado en un 30% entre febrero y abril respecto al año previo, a un promedio de 1,1 toneladas mensuales, según datos oficiales.
Solo en abril, la producción en Madre de Dios saltó un 116%, constituyendo un 40% del incremento en producción aurífera de ese mes frente al mismo lapso del 2014, lo cual ayudo a impulsar a la actividad económica de Perú a su mejor tasa de crecimiento en 13 meses.
Si continúa la tendencia, la minería podría destruir aún más a parte de las zonas de mayor biodiversidad de la Amazonía en la frontera con Brasil, hogar de tribus aisladas y bosques ricos.
Durante la expansión de la minería en este siglo, decenas de miles de mineros depredaron más de 50.000 hectáreas de bosques en Madre de Dios y arrojaron toneladas de mercurio en los ríos.
Fernández afirmó que los mineros están retornando a algunas partes de Madre de Dios que habían sido depuradas el año pasado.
Pero precisó que esto se revertiría pronto.
"Para el próximo semestre nuestra prioridad será Madre de Dios y sobre todo comunidades nativas, áreas naturales protegidas y cuencas hidrográficas", dijo el funcionario.
Fernández señaló que ha enfocado los recursos limitados del Gobierno en evitar que la minería ilegal se expanda a nuevas regiones.
Las operaciones de interdicción del año pasado recortaron la producción de la minería ilegal en Madre de Dios en la mitad a unas 8 toneladas, contribuyendo a que la producción y exportación de oro de Perú cayeran en un 10 y 19%, respectivamente.
La minería ilegal en Madre de Dios ha representado un 10% de la producción de oro de Perú en décadas previas.
Perú fue el octavo mayor productor mundial de oro en el 2014. El Gobierno espera que la extracción del metal precioso se incremente un 13% este año.