Funcionarios de Azcuba, entidad que en 2012 sustituyó al ministerio del Azúcar, indicaron que la producción de azúcar en Cuba deberá crecer 15% durante la zafra que se inicia en noviembre.
El gobierno cubano ejecuta un programa de inversiones para aumentar la producción de azúcar y sus derivados, de cara a la zafra que se inicia en la segunda mitad de noviembre próximo.
Esas inversiones incluyen la modernización de destilerías, construcción de nuevas plantas de pienso ensilado (forraje), miel, urea, bagacillo de caña y bloques multinutricionales, señaló a periodistas el director de Inversiones del Grupo Empresarial Azcuba, Pedro Pérez.
En el programa también aparece la introducción en los últimos años de más de un centenar de cosechadoras brasileñas de alta productividad y eficiencia, así como de camiones y carretas autobasculantes que disminuyen la compactación del terreno.
Pérez señaló entre las principales inversiones realizadas en los últimos cinco años, sobre todo desde el proceso de reanimación de la cosecha cañera y producción del dulce, la introducción de modernas técnicas para el suministro de agua a las plantas, entre ellas el sistema riego por goteo.
En cuanto a la esfera industrial, los esfuerzos se orientan al aumento de la capacidad de molienda, mejoras en los almacenes de azúcar, construcción y rehabilitación de tanques de miel y la modernización de destilerías.
El directivo subrayó la prioridad de la producción de caña, aspecto primordial para luego obtener azúcar, alimento animal, energía y oros derivados.
Funcionarios de Azcuba, entidad que en 2012 sustituyó al ministerio del Azúcar, indicaron que la producción de azúcar en Cuba deberá crecer 15% durante la zafra que se inicia en noviembre.
"El objetivo para esta contienda es alcanzar un crecimiento de más de 15%", dijo el especialista de Azcuba, Liobel Pérez.
De acuerdo con lo planificado, la zafra 2013-2014 se iniciará desde la tercera semana de noviembre y se prevé que muelan 50 centrales, dos más que en el año anterior, de las cuales seis deben incorporarse entre la tercera y cuarta semana de noviembre, 37 en diciembre y siete en enero de 2015.
Las reparaciones de las refinerías, que comenzaron en julio, ya están al 50%, situación muy superior a la presentada en igual periodo del año anterior, cuando a esta altura estaban alrededor de 30%.
Azcuba espera que en la zafra venidera se alcance un rendimiento aproximado de 44 toneladas de caña por hectárea.
Está previsto que la zafra se ejecute en 148 días y que cocnluya en la provincia de Holguín (este) en la primera semana de mayo, cuando 44 centrales molerán más de 100 días mientras que el resto lo hará entre 90 y 100 días.
Cuba logró aumentar la producción azucarera 3% durante la zafra 2013-2014 ,a pesar de las afectaciones provocadas por el mal tiempo.
El plan de incremento para esa zafra era de 18%, pero las lluvias en varios territorios y un invierno atípico, de poco frío, influyeron las dos terceras partes del tiempo perdido por la industria.
Cuba tampoco pudo cumplir sus proyecciones de producción azucarera durante la cosecha 2012-2013, la cual concluyó con sólo 89% del plan de producción.
El sector azucarero, que durante décadas fue la principal industria de la isla, sufre de una severa descapitalización y representa ahora alrededor del 5% del ingreso de divisas de la nación caribeña.
Ocho de las 59 refinerías azucareras de Cuba se construyeron en la década de 1970 y 1980, pero el resto se erigió antes de 1959, por lo que la mayoría requiere de una fuerte inversión de capitales para ser rehabilitados.
El plan de reformas económicas que emprende Cuba señala como objetivos prioritarios de esta industria el incremento sostenido de la producción de caña, el perfeccionamiento de la relación entre el central azucarero y los productores cañeros, y la diversificación.
Azcuba espera revertir un largo declive en la producción local desde 8 millones de toneladas en 1990 y planea producir 2,4 millones de toneladas en 2015.
Considerada en otros tiempos como la "locomotora económica del país, la industria cubana tocó fondo en la cosecha 2009-2010, cuando registró una producción de 1,1 millones de toneladas, la peor en 105 años.
La isla consume entre 600.000 y 700.000 toneladas de azúcar anuales y vende unas 400.000 toneladas a China.