Según las cifras del Operador Nacional del Sistema Eléctrico, el nivel de agua promedio en las represas de las hidroeléctricas ubicadas en las regiones sudeste y centro-oeste del país el pasado domingo era del 39,98% de su capacidad.
Río de Janeiro. El ministro brasileño de Minas y Energía, Edison Lobao, descartó este lunes que Brasil pueda sufrir desabastecimiento eléctrico en las próximas semanas pese a que el nivel de agua en las hidroeléctricas está en mínimos alarmantes.
Lobao aseguró en declaraciones a los periodistas de que el riesgo de que pueda faltar energía es "cero", pero admitió que Brasil está dependiendo actualmente de la energía generada por sus plantas térmicas de gas natural, que es más costosa y contaminante.
Según las cifras del Operador Nacional del Sistema Eléctrico (ONS), el nivel de agua promedio en las represas de las hidroeléctricas ubicadas en las regiones sudeste y centro-oeste del país el pasado domingo era del 39,98% de su capacidad, el menor en el último año; mientras que la situación de las represas del sudeste es la peor desde 1953.
Las hidroeléctricas del sudeste y del centro-oeste son responsables de cerca del 70% de toda la energía producida por Brasil, un país cuya matriz energética es mayoritariamente hidráulica y que tan sólo acciona sus plantas térmicas para complementar la energía producida en las represas.
El actual nivel de agua en las represas es semejante al registrado en febrero del año pasado, cuando igualmente surgieron dudas sobre la capacidad del abastecimiento eléctrico del país debido a la falta de lluvias, a la sequía en algunas regiones y a la rigurosidad del verano austral.
"Estamos con más del 40% (de almacenamiento de agua) en las principales represas y no identificamos ningún riesgo de desabastecimiento por ahora. Riesgo cero", afirmó Lobao.
El ministro dijo que la situación actual es mejor que la del año pasado y agregó que el Gobierno está permanentemente atento al nivel de agua en las hidroeléctricas.
El funcionario admitió que la entrada en operación de algunas térmicas para suplir la demanda y reducir el uso de agua en las hidroeléctricas puede elevar el costo de la generación de energía del país, por el consumo mayor de gas natural y de diesel.
En este sentido, Lobao aclaró que el Gobierno estudia fórmulas para evitar que la elevación del costo de la generación eléctrica sea pagada por el consumidor.
"El hecho es que la repercusión (del aumento del costo de generación) no será inmediata. Y, si la hay, será mínima. Encontraremos la mejor solución posible para preservar la situación del consumidor", afirmó.