Los niveles de agua en los embalses de las hidroeléctricas que proveen la mayor parte de la electricidad del país cayeron cerca de niveles críticos, reportó el diario Folha de Sao Paulo.
Brasilia. La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, convocó a una reunión de emergencia con funcionarios del sector de energía, ya que los niveles de agua en los embalses de las hidroeléctricas que proveen la mayor parte de la electricidad del país cayeron cerca de niveles críticos, reportó este lunes un diario local.
Según Folha de Sao Paulo el riesgo de un déficit de energía aumentó luego de que los niveles en algunas represas cayeron hasta dos tercios por debajo de los del año pasado justo en momentos en que crece el consumo por las altas temperaturas.
Racionar la electricidad, un escenario que analistas del sector privado ven como probable, podría causar fuertes disrupciones en la industria de la sexta economía más grande del mundo, que incluye a grandes consumidores como las empresas del sector siderúrgico y minero.
El verano austral es normalmente la temporada de más lluvias en Brasil, pero la región nordeste del país sufre la peor sequía en décadas y la situación podría agravarse en los próximos meses.
En el sur del país, una zona densamente poblada que concentrada la mayor parte de la industria, se esperan los niveles habituales de lluvia, según la agencia gubernamental de meteorología Inmet.
La reunión sería encabezada por el ministro de Energía, Edison Lobao, y la presidenta no participaría, agregó el diario. Funcionarios de la oficina presidencial contactados por Reuters dijeron que no se había convocado una reunión por el momento.
Mauricio Tolmasquim, jefe del instituto de investigación de energía y cercano al gobierno de Rousseff, dijo este lunes en una entrevista radial que no se programó una reunión.
El funcionario afirmó que no existe riesgo de un déficit ni necesidad de restringir el suministro y que las autoridades echarían mano a la generación con gas si fuera necesario.
El índice de acciones líderes de Brasil Bovespa caía casi un 1% a las 13:35 GMT. El índice del sector eléctrico IEE perdía un 3,02%.
"Ridículo". El gobierno racionó la electricidad en el 2001 e interrumpió temporalmente el suministro a los hogares que excedían ciertos límites de consumo, en un duro golpe al crecimiento económico de ese año.
Aunque el gobierno no parece preocupado y Rousseff rechazó a fines de diciembre la idea de racionar la electricidad -dijo que era "ridículo" pensar en eso- el sector privado está cada vez más inquieto.
Varias grandes ciudades sufrieron apagones esporádicos en los últimos meses.
"La posibilidad de no tener racionamiento es pequeña. La situación es ultra crítica", dijo la semana pasada a Reuters un ejecutivo del sector eléctrico.
La fuente, que habló a condición de no ser identificada, añadió que su compañía incluyó un período de racionamiento en sus planes para el 2013.
El suministro eléctrico ha sido noticia en Brasil durante los últimos seis meses, luego de que el gobierno logró imponer grandes recortes en las tarifas de la energía a los consumidores, una medida que generadores y distribuidores afirman que podría mermar la inversión.
Analistas del banco de inversiones BTG Pactual Group dijeron en una nota publicada el lunes que el costo de la electricidad podría dispararse hasta un 14% si Brasil es forzado a echar mano a sus centrales térmicas para compensar el déficit de generación hidroeléctrica.