"Estoy preparando una ley para facilitar expropiaciones y nacionalizaciones para enviarla a la Asamblea Nacional", sostuvo el mandatario, quien llamó a no confundir el proceso con confiscaciones.
Reiterando las advertencias lanzadas hace algunos días, el presidenteecuatoriano, Rafael Correa, dijo que el proyecto de ley para penalizar a laspetroleras que rechacen ceder su producción al Estado, incluye lanacionalización de sus activos en el país.
"Estoy preparando una ley para facilitar expropiaciones ynacionalizaciones para enviarla a la Asamblea Nacional",aseguró Correa, que ha prometido llevar al miembro más pequeño de la OPEP hacia el socialismo, enuna entrevista que reproduce parcialmente ElComercio.
Correa agregó que "expropiar no significa confiscar. Confiscarsignifica tomar por la fuerza sin la correcta compensación económica. Acá lesvamos a compensar económicamente, pero si no quieren adaptarse a los términosdel país, que les vaya bonito. No los necesitamos".
El proyecto del gobierno ecuatoriano apunta a transformar las compañíasprivadas en proveedoras de servicios, pero las tratativas se han dilatado y lasautoridades afirman que el país pierde dinero con cada día de postergación.
Las principales operadoras petroleras que actúan en Ecuador son la españolaRepsol, la brasileña Petrobras, el consorcio chino Andes Petroleum y laitaliana Eni y conjunto representan cerca del 40% de la producción diaria delpaís sudamericano. El resto está en manos de las empresas pública EPPetroecuador y EP Petroamazonas y la estatal Río Napo, asociada a la venezolanaPdvsa.
La hispano-argentina Repsol afirmó que cuenta con una prórroga dadapor las autoridades para renegociar los contratos petroleros en Ecuadors.