Empresarios del sector automotriz advierten de una posible desaceleración en sus planes de inversión y compras externas, ante la medida anunciada por el gobierno de Ecuador de limitar las importaciones de automóviles como una forma de reducir el déficit comercial del país.
Empresarios del sector ecuatoriano advirtieron que la decisión del gobierno de limitar las importaciones de vehículos posiblemente provocarán una desaceleración de inversiones y compras externas, lo que se traducirá en la reducción de hasta el 20% de las ventas obtenidas en 2010 y que totalizaron 130.350 unidades.
La medida decidida por las autoridades, aunque aún no oficializada, apunta a reducir el déficit comercial de Ecuador y disminuir las importaciones de bienes de consumo, que crecieron en cerca de US$1.000 millones el 2010 respecto a 2009.
De ese monto, más de US$670 millones correspondieron al sector automotor, incluyendo vehículos en general, híbridos, camiones, CKD (partes para ensamblaje) y llantas. La medida de las autoridades apunta específicamente a los vehículos generales e híbridos, que a noviembre de 2010, representaron más de US$310 millones.
Propuesta. En ese plano, y en caso que el gobierno implemente la medida, Fabio Missale, de la Asociación Ecuatoriana Automotriz del Ecuador, apunta a que la primera preocupación del sector es saber el margen de la restricción: no se conoce si será de 15% o 20% del total, de acuerdo al diario Hoy.
Con esa inquietud, lo ideal para el sector automotriz sería que la reducción en el margen de importación sea mediante RUC y no por partida. Ello, según Missale, permitirá que el importador decida la conveniencia sobre qué importar, basado en la demanda del consumidor.
Las medidas que el gobierno estaría barajando y que no se han hecho oficiales, serían el aumento del arancel del 35% al 40% para un segmento de vehículos; pero también estima reducir un 5% las importaciones de CKD, y además un registro para importadores.
Adicionalmente, se especifica que la modificación gubernamental afectará a vehículos importados que tienen motores de entre 1.000 y 1.900 centímetros cúbicos, lo que implica autos de gama popular, 4x4 y 4x2, pero también camionetas y camiones de hasta 4,5 toneladas.
De hecho, se estima que aproximadamente el 60% del mercado de automóviles importados se vea involucrado en el alza arancelaria, según cálculos del gremio.