Durante un añose ha registrado una operatividad normal y con alrededor de 5.000 vuelos mensuales.
Quito. La nueva terminal aérea Mariscal Sucre de Quito, ubicada en Tababela (nororiente) cumple un año de funciones este 20 de febrero, en el que se ha registrado una operatividad normal y con 5.000 vuelos mensuales durante este periodo.
“Aproximadamente se registra entre 160 a 190 vuelos diarios (nacionales e internacionales) con un total al mes de un poco más de 5.000 vuelos”, informó Hugo Mejía, jefe de tránsito de la Dirección Aérea Civil (DAC).
El nuevo aeropuerto supuso un gran cambio para quienes trabajaban en la ex terminal que quedaba en el norte de la capital, ya que ésta cuenta con 4.100 metros de pista (un kilómetro más que en el antiguo terminal), considerada la más grande de Latinoamérica, y cuenta con una torre de control de 41 metros de altura.
“Desde la torre de control se establecen dos posiciones, una de superficie que se encarga del movimiento y rodaje de las aeronaves en tierra y la posición de torre de control, desde la cual se dan las instrucciones para despegue y aterrizaje”, explicó Mejía en entrevista con Andes.
Esta terminal también cuenta con una plataforma adecuada únicamente para carga. “En el antiguo Mariscal estaba limitado, prácticamente estaba unido lo que era carga con las aeronaves con pasajeros”, indicó.
Ahora las aeronaves de carga pasan a una calle de rodaje en la que no comparten con los aviones de pasajeros al momento del remolque.
Existe una plataforma adecuada para carga, ya que en el antiguo mariscal eso estaba limitado prácticamente estaba unido lo que era carga con las aeronaves con pasajeros. Ellos pasan a una calle de rodaje que no van a compartir con estas aeronaves el momento del remolque.
Mejía explica que la ventaja del largo de la pista del aeropuerto permite el despegue y aterrizaje de un Boeing 747-800, de la compañía Emirates –específicamente para carga- que es uno de los aviones más grandes de carga que ya funcionan en el país.
“Incluso este aeropuerto tendría la capacidad de que aterrice el Airbus 380, que es el más grande después de varios estudios que se realicen”, agregó Mejía.
Pero no solo los vuelos de carga han tenido un cambio importante en la actual terminal, sino la ampliación de rutas directas en vuelos comerciales como la llegada de la compañía Aeroméxico con la que se abrió la ruta directa Quito- México, además, de vuelos directos desde la capital hacia Madrid, Buenos Aires, Sao Paulo, Nueva York, Ámsterdam, entre otras, lo que ha incrementado en un 12% los vuelos internacionales.
La próxima ciudad aeroportuaria
La ventaja de ser una terminal aérea más grande ha permitido un crecimiento comercial importante dentro y fuera del lugar, en el que se ha construido el Quito Airport Center, un centro comercial capaz de complementar los servicios aéreos para pasajeros y habitantes de la zona.
“La idea con este amplio terreno (donde es el aeropuerto) ubicado fuera de la ciudad en el cual se puede crecer e instalar servicios complementarios, estamos desarrollando lo que se conoce como una ciudad aeroportuaria, que quiere decir que no solo es una terminal aérea o infraestructura técnica sino que alrededor de ella están surgiendo servicios complementarios orientadas al pasajero y a la creciente población aeroportuaria”, explica Luis Galárraga, gerente de Prensa de Quiport.
Actualmente trabajan en el aeropuerto cerca de 5.000 personas, en quienes se ha pensado al momento de construir este edificio en el que existen locales de comida, servicios de farmacia, lavandería en seco, entre otros.
Otro desarrollo importante es el centro logístico de carga, el centro Tabacarce ubicado a la entrada del Mariscal Sucre. “Aquí funciona todo lo que es el servicio de carga importación, donde se ubican la aduanas y también están ubicados los couriers (entregas)”, explica Galárraga.
Este centro aduanero es considerado uno de los que mejor funciona a nivel nacional, ya que “existe un despacho de los productos de manera eficiente”, asegura. En este centro aduanero también funciona la carga de exportación, específicamente de flores, donde existe un sitio específico para este servicio.
El crecimiento de la zona aeroportuaria también continuará durante este 2014, con la ampliación de una zona de embarques de pasajeros. “Estamos hablando de un espacio de 5.260 metros cuadrados adicionales que estarán a servicio del pasajero”, agregó Galárraga. En esta zona se prevé adecuar espacios de circulación, locales comerciales, baños y accesos.
